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El

canon estetico. Apuntes sumarios para una iconografla

3Es posible que el arte, yen general las formas artfsticas, guarden una suerte de homologfa con la re–

presentaci6n mental del mundo, incluso con la filosoffa? Eso es lo que propane la obra fundadora de

Erwin Panofsky

(

1892- 1968).

Salido del drculo mftico de Friburgo, Berlfn y Munich, obligado a partir en

1933

cuando llegan los nazis, desenvuelve en los Estados Unidos lo esencial de su contribuci6n. Por mi

parte, habfa frecuentado su obra

-Historia

de/

arte

y

el analisis iconogr6fico-

cuando estudiante y

candidato a una tesis de doctorado en Paris, pero casi como un caso aparte. Me ayudaba a entender

los primitivos flamencos, los grabados de Durero, la armadura arquitect6nica levantada sobre las ojivas

de las iglesias g6ticas, y me admir6, entonces, la relaci6n que establecfa entre obras de arte y con–

vicciones religiosas y filos6ficas. Pero luego lo olvide, asf lo crefa hasta que, sorpresivamente, al revisar

cronicones antiguos y 16minas del fondo bibliogr6fico de la Biblioteca Nacional para este libro, esa obra

y propuesta, retornaron con fuerza enorme.

Panofsky, en

1927,

habfa publicado un trabajo decisivo sobre la perspectiva en tanto que aparici6n

enhebrada a otros aspectos del Renacimiento. Si esto es asf, las formas artfsticas lejos de poder enten–

derse como un campo aparte, se vinculan a convicciones profundas de orden teol6gico o filos6fico.

Son formas simb61icas, un concepto que toma del fil6sofo Cassirer. Pero claro est6, hay un c6digo que

descifrar. Para Panofsky una obra de arte tiene diversas lecturas. Una significaci6n inmediata, primaria,

la de los sentidos. Un significaci6n secundaria, la de sus contenidos. Yuna tercera, revela la mentalidad

de una close, un perfodo, una sociedad. Comence, pues, a mirar y correlacionar estas estampas del

pasado colonial con algo m6s 0116 de los gustos.

La lecci6n de Panofsky, sin embargo, no es la estre–

cha relaci6n simb61ica que establece en su obra mayor,

L'CEuvre d'art et ses significations

(

1955)

entre arte g6tico

y pensamiento escol6stico, sino si esa relaci6n entre arte

y pensamiento se verifica tambien en otros casos. En otras

palabras, la pregunta que sumariamente podemos ha–

cernos, para el caso presente, es la siguiente: 3con que

tendencias profundas del sentir y el pensar se relacionan

los signos iconogr6ficos que aquf evocamos? A primera

vista el nexo que aparece es con el orden religioso. Es la

evidencia misma, cristianizaci6n y religiosidad fueron a

la par, como senala Teodoro Hampe. Sin duda, la iglesia

juega un pope! central en la dominaci6n colonial, aunque

la sociorreligiosidad no dependfa directamente del Papa

sino del Rey, como senala Victor Perez-Dfaz. En fin , a lo

que vamos, en la cultura virreinal, la teologfa escol6stica

tuvo un reinado prolongado y no discutido. Ahora bien,

3que es una escol6stica? Una doctrina, una escuela, que

desde la Edad Media al siglo XVII (acaso un poco m6s en

Indios) , trata de conciliar la fey la luz natural de la raz6n .

De manera peyorativa la definici6n se extiende a todo lo

que expresa excesivo formalismo. Observemos, por eso, la

lamina vecina. Estas Descripciones de las Indios Occiden–

tales, esta

Novus Orbi,

sigue limpiamente la argumentaci6n

arquitectural propia a un templo, basamento de piedra,

umbral de grandes peces, dos pilares, yen lo alto, cum–

brera coronada de sfmbolos. Si vinculamos esa portada,

su c6digo de organizaci6n, con cualquiera de los textos