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de ancho. Cuando es redonda se llama "bala" y entonces sus diá–
metros son más exiguos.
El ''mestizo'' es otra variedad de miel de palo, muy deliciosa.
En su elaboración interviene una abeja parecida a la avispa pero
más menuda
y
alargada, de color rubio.
El ''moro-moro'', que forma enjambres ruidosos dentro de los
árboles, es ya una abeja mayor, negruzca pero listada de manchas
blanco amarillentas que le dan su nombre. Elabora una miel abun–
dante y sabrosa.
Hervida la miel del ''moro-moro'' sirve para ''poner parchis
o curar las quebraduras". También se usa con té de quinpi para com–
batir la tos.
La ''yana'', del quicl,lua negro o negra, es también una variedad
de miel de palo. Sus abejas más grandes que las del ' ' tiu-simi'' y
semejantes a las del "caiasán o trompeta", aunque más oscuras, ela–
boran una miel gruesa, parda, de sabor muy agradable.
El "camatí", es una -clase de avispa jaspeada de .amarillo que
hace s panal como la achi uana' ', aunque enorme, fuera de los
tronco . B ro en lugar d
;e;
g
a
· construye entre
los m tor
hasta veinte y
más litros
El ''caía
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' , se caracteriza por
un p1 o
a e procedencia en el
orifici
e para individuali-
zarla. a abeja, como su iel, son se ejantes a las de la ' ' lachigua–
na ''. La cera del ' ' caiasán' ', por su forma de embudo o trompetilla
es usada para curar la sordera.
El "ashpa-mishqui ", del quichua "ashpa ", tierra y "mishqui ",
dulce, es un enjambre de abejas pequeñas
y
pardas que tienen la
particularidad de depositar la miel bajo tierra, en tubos de cera
perpendiculares, de 20 a 25 centímetros de largo por 3 a 4 centí–
metros de ancho, y unidos unos a otros por una sustancia muy
friable. Se la reconoce al aplicar el oído en tierra por el zumbido
que producen, o si no al divisar sobre el sitio de la colmena una
especie de humo o de nube, muy tenues, formados por el vuelo de
las abejas. Su miel abundante
y
exquisita -es muy codiciada.
Hay, por fin, unos insectos que construyen bajo tierra una ni–
dada de pequeñas tinajas de barro, dentro de _las cuales depositan
una sustancia melosa, amarillenta, farinácea, constituída por el po–
len de las flores.