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poco de tierra cernida, del mismo corral'' o bien ''la cancha (
1 )
del perro ' '.
Por fin, algunos recomiendan introducir bajo el párpado algu–
nas "hojitas molidas de jumi blanco,_(Suaedia marítima)".
LA OJEADURA
El "mal ojo'' produce enfermedades y éstas se llaman "ojea–
duras''.
Según la creencia supersticiosa, este daño puede ser intencional
o casual. En este sentido, se acepta, )pues, que una persona pueda
llevar, sin saberlo, gérmenes malignos que se trasmiten psíquica pero
inconscientemente.
Los afectados son niños, por lo general, es decir seres inconscien–
tes también que no saben prevenirse de por sí, y a los cua1es, para
prevenirlos se los mune de ciertos amuletos, que han sido estudiados
en la parte general.
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incha las fontanelas todavía no
osificadas. Si el viajero no hiciera alguna caricia a la .criatura para
congraciarse su voluntad y si diera la casualidad de que se enfer–
mase, lo que es también muy frecuente en Sgo. donde la morbilidad
infantil es la regla, se habría producido un caso de "ojeadura ".
Para curarlo, se envía de inmediato a buscar al viajero. Si éste
no pudiese volver, que es lo más frecuente, manda en lugar suyo
un mechón de sus cabellos, con los que se "sahuma el enfermito".
EL ORZUELO
La infección estafilocóccica de la glándula de Zeiss produce en
el borde palpebral una tumoración redondeada y circunscripta, bas–
tante dolorosa. El diagnóstico es lácil y el pueblo no se equivoca
nunca.
( 1)
Guano blanco de perro.