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la
de la
e
olección completa de recetas del célebre
DR.
MANDOUTI,
1837, tuvieron amplia acogida entre esos pobres y desamparados po–
bladores de nuestras estancias, los cuales encontrarían en ellas la
~uía
para el tratamiento y en ciertos casos para el diagnóstico de
· las enfermedades que padecieran.
·De
este modo, el término debió infiltrarse hasta lo profundo de
la sociedad, y grabarse en la mentalidad del vulgo, cuyo léxico lo
incorporó como · un bien propio, sobre todo por la
tem~bilidad
con
que venía revestido el mal y, sobre todo, por la pompa de su · rece–
tario, causas por las que persiste todavía en · el recuerdo, juntó a
otros nombres de la nomenclatura española de aquel entonces, que
se difundieron por otras circunstancias.
Según autorizadas opiniones, este azote fué llevado de Améri–
ca (
1 )
por los españoles que acompañaron a Colón, desarrollándose
en forma violenta y con carácter epidémico, en Nápoles, el año
1495, región que estaba entonces en ' poder de España (
2 ).
Con la
se opone
gua en
hf· ~~~~~~~~
del Este y
Tamb1 '
hac mención de
trabajo del Jesuíta mejicano Francisco Saverio
Clavijero, que en 1780 publicó un erudito estudio sobre ''El Origen del Ma'l
Venéreo"· Dicho trabajo "después de combatir con sólidos a1·gumentos y qui–
zás con demasiada acritud al historiador Gonzalo Hernández de Oviedo, de
' -quien afirma que fué el primero en propalar la noticia de que el mal venéreo ...
procedía de América concluye diciendo:
' rFúndome:
1Q
~n
que ni Cristóbal
Colón en su Diario, ni D. :Fernar..do Colón en la vida de su famoso padre,
hablan una sola palabra de aquel contagio; sin embargo de que ambos ...
~ue11tan
m·enudamente 1os males y padecimientos de los primeros viajes. Tam–
poco habla de aquella
gr~n
novedad ... Pedro Mártir, autor contemporáneo de
Colón
y
que debía tener
·bu~nas
noticias como protonotario que fué d·el Consejo
de las Indias
y
abad de la Jamaica. Oviedo. . . no estuvo
~en
aquella parte
del mundo sino veinte años después. . .
2Q
Fúndome también en que si la
América hubiese sido la patria del mal venéreo y los americanos los primeros
que lo padecieron, la América sería el país en que con más extensión reinase
y
los americanos los más propensos a contraerlo; pero no es así" (Breves apun–
tes sobre la medicina, la cirugía, la higiene y la terapéutica entre los Mayas,
págs.. 18
y
19).
(2) Karl Sudhoff, niega que la epid-emia Napolitana de 1495 haya sido
de sífilis, atribuy éndola por el contrario a la fiebre tifoidea (Garrison, ' ' His–
toria de la Medicina' ').