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Q.Noexiste en esta lengua la J
inicial. El
Inca Garcilaso de la Vega hace deducir
de las referencias que da so·bre la J cas–
tellana en el quíchua, que solo había un
sonido más suave al final de sílaba como
la C ·.::astellana o CH
alemana.
El padre
Miguel Angel Mo'ssi dice que la J
tiene
en quíchua la "guturación
hebreo-árabe
de
la
YAlN
(a
á in) pues se halla en quíchua
en las palabras cuya procedencia, etimolo–
gía y significa:.::ión son
hebreas
puras, v.
gr.:
YAMAM,
unirse,
juntarse
que
en
griego se convirtió en
G-GAMA,
la unión;
en
i.taliano GAMBA,
cosa unida, en
fran–
cés JAMBE;
en castellano
EN_JAM-BRE,
multitud unida; en quíchua
JAMUY,
ve–
nir;
JAMU-CHI-Y,
hacer venir, mandar o
hacer que venga". Mossi menciona tambi én una letra compuesta de K y J
(KJ) más
gutural que la KH por llevar, precisamente consigo· la J española que la hace servir
-dice- para la pronunciación de la
YAIN hebreo-árabe
con sonido de ambas letras
muy mar.::ado, v. gr.:
KJAPAC,
rico·, sabio, poderoso, como
Manco Kjapac.
Agrega Mos–
si: "Para los que no saben pronun·.::iar la J
castellana cuesta un poco de
trabajo
acostumbrarse a esta pronunciación , pues los
italianos
dicen
CARAGHEO
por carajeo,
doblarse , "se flectere'' que viene de
la raíz
CARAY,
ser flexible; más como todos
saben hacer gárgaras con agua en la garganta, 'será fácil por este medio• adiestrarse".
Ay. No existe la J castellana en
este
idioma, pero a ve·ces
se Jpronuncia un sonido
como KHA, KHE, KHI , KHO y KHU en medio y fin de dicción que suena como JA,
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JE, JI, JO, JU.
Ar. Forma parte del alfabeto araucano y el
calepino
de Chile co·n pronun-ciación de FE;
pero no usan las sílabas JA, JO, JU castellanas. Sin embargo, acostumbran a
veces
mudar la J por D o R como
DUCA
o
JUCA
por
RUCA,
la casa;
CUJAM
por
CURAM,
hueso, et"C .
G. En el alfabeto guaraní de ésta época, el sonido de la J está representado por JH
como en
jhé-e,
dulce;
mbojhé-e,
endulzar. Su fonética es 'de H gutural con ortografía
de JH. Como se comprueba en toda la obra, Ruíz de Montoya desconoda la J, lo que
hace suponer que no existió en el alfabeto' antiguo. Dicha letra se habría incorporado
al idioma, como opina 'Portnoy, en los primeros encuentros con el ·castellano.
L .
T. En este idioma falta la J castellana, pero existe una H aspirada que suena
CO'–
mo J. En el idioma
tehuelche
la
K
suena como J inicial; en el
mataco
existen una J
gutural y otra nasal; en el
toba
la H suple
Gl.
la J. Es letra del alfabeto
ona
y el
cha–
ná
cuenta con una J gutural.
JABALI.
Q.
·Zintiru.
Ay.
Kita ccuchi.
Ar.
CUCHI.
G.
Tañicatl~
tayacú-eté/
YAGUAR.-ETÉ,
puerco de gran tamaño/
Cuatí/
Taya~ú
eté/
El cerdo montés,
curé caagüi/
Dic–
ción y grafía modernas, de jabalí,
taite–
tú.
Toba.
Nicháj .
J'ABON.
Q.
Ttacsana roque
(fabricado con la raíz de
un . espino).
Ay.
Sapona-ttakhsaña.
Ar.
QUILLAY,
nombre también del árbol de
-cuya corteza sacaban espuma como jabón/
CúLLAY
(actualmente está muy
indus–
trializado).
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