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casi enteramente. en el tumulto brumoso, en que, parad6gicamente,

en lamentable consor cio, la espada y la cruz destruyeron mucho de

lo

que

deb.la

ser conservado.

El caracter de los cronistas determin6, pues, el caracter de las

Cr6nicas. La misi6n que desempeiiaban, el espiritu preformado el

punto de vista unilateral con que contemplaron las cosas de

Ame–

rica, hacen que. sus conclusiones deban ser compulsadas y someti–

das a eierto rigor cr itico.

Por esto, para nuestro estudio, en la

Cr6nicas consideramos

un aspecto positivo y un aspecto negativo.

En el aspecto que llamamos positivo en la r az6n directa o indi–

recta que se da de los elementos literari os, encontramos una defi–

ciencia enorme : pobreza, despreocupaci6n , indiferencia; escasez o

ausencia de datos y de e piritu de investigaci6n artistica. Esto nos

obliga a r econocer culpable aquel desden o qe preocupaci6n de los

eronistas por un factor de arte, por esa fase cultural que no toma–

ron en cuenta los historiadores de la conquista.

En el aspecto negativo-negaci6n de toclo valor espiritual de

los indio , calificaciones despectiva , exagerada

imputaciones de

vicios y perversiones, a ignaci6n de un nivel enteramente inferior.

tanto en lo moral como en lo intelectual,--s6lo tenemo que ver un

criterio equivocado o £also, aprioristico y en flagrante contradic–

ci6n con igo mismo en ocasiones, como ocurre con el P . Morua, y

con el testimonio de otros e paii.ole , como el manifestado en el te -

tamento de L eguizamo.

De todo lo dicbo, preciso e bacer honrosa excepciones, cierta–

mente : Las Ca as, Aco ta, ieza. E te quer ia un Tito Livio o un

Valerio para que escribiera "las maravilla del P er(1 ". En el capi–

tulo XXXVIII de su

Cr6ni a del

P en /

e cribe de. los indios: ' ' pu–

dieron tanto, que conquistaron i senor aron desde Pa to hasta Chi–

le, i sus banderas vieron por la parte Sur al rio Maule, i por la del

Norte al rio Angasmayo, i e to rio fueron t ermino de. su imperio

que fue tan grande que hay de una parte a ot ra mas de mil tre -

cientas leguas. I edificaron o-rande

fortaleza . . . . Hicieron tan

grandes cosas

i

tuvieron tan buena gobernaci6n, que. pocos en el

mundo les hicieron ventaja; eran muy vivo de ingenio i tenian gran

cuenta, sin letra ' porque estas no e han hallado en estas partes

de las indias. Pusieron en

bue.na

co tumbre a us (1bdito .... Te–

nian g:ran cuenta con la inmortalidad d l anima i con otros secreto

de la naturaleza ".-Acosta- como hemo visto-dedica un capitulo

de su

Hist01·ia Nat1iral

y

Moral

a tratar de la " Int ligencia y apti–

tud de Jos Indios",

y

cree que "ning1ln hombre de, consideraci6n

habra que no se admire de tan noble y pr6vido gobierno. "-Las Ca-