FOLKLORE Y APUNTES PARA LA SOCIOLOGIA INDIGENA
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Es cierto que, es pegado a las costumbres, por consiguiente está en.
un estaido de infantilismo, y a consecuenca de su abulia, la cual a su vez es
efecto <le la secular lucha de clases que ha libra<lo y libra
actualment~.
No es congénitamente refractario a la cultura, como sostuvo el mismo abo–
gado; sino que la instru·cción no ha sido da<la con método y por la natural
desconfianza que le inspira el blanco.
Pero <le 10 años a esta parte, el
~ernáculo
ha comprendido que la explotaeión de que es víctima, se debe
a su- ignoracia; en la act ualidaid los mismos indios pagan los salarios
de
profesores, como suce<le en las Provincias de Paucartam·bo y Quispicancht.
Tiene restos de colectivismo agrario y de la socialización del trabajo,
como veremos en posteriores líneas. Tiene muy en cuenta "el qué dirán..
o la sanción social de sus semejantes, porque nada le importa el concepto
<le los blancos.
He aquí algunas virtudes ' de las que ha prescindí-do López Albújar.
En la Conferencia de Egreso de la Academia de Práctica Forense, en
Arequipa, Antero
Peralta, sostiene que el aborigen
es ·desinteresado.
Tanto éste
como aquél
sostienen . que
es
iIIl!Penetrable,
lo mismo
creíamos nosotros,
pero hoy que
hemos examinaido
de un modo más
<ietenido, pensamos que hay medios de penetrar en su vida privada
y
su
psicología. Pero ¿cómo?. Viviendo con él, captándose la confianza
y
em·
pleando el método de la observación y a la vez desprendiéndose de todo
prejuicio racial
y
social.
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Para hacer con método dividiremos en matrimonio
y
gobierno familiar.
Es una institución. Esta palabra es castellana quechuizada.
Significa mutuos servicios. Corresponde a la época de prueba, antes de en·
trar al estado matrimonial. Es probable que sea de la época incaica, porque
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inconcebible, que, al acaso del curaca o del Inca, cogieran a ·las iparejas
para unirlas, por el sólo .hecho <le haber· llegaido el varón a
los 24 años
y la mujer a los 18, es probable que en esas épocas determinadas legiti–
maban el sirvinacuy. En la actualidad es una costumbre generalizada, entre
todos los indios; entre los aimaras se conoce con el nombre de "serviciña".
Albújar no hace mención de esta institución y él cree que el matri–
monio ha sido hecho por cálculo. No podemos aceptar como indudable. Pues
esta institución nos prueba lo cóntrario, porque
ella
es
debido al
es-