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a
í
qn
el
párr,
fo
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le
tal modo qu uno de lo come–
ta ,
t
nía le forma de un león, el otro la de un ofidio. Vol viendo ahora a lo
do párrafos de Oobo
r
cién tran crito ,, ob
erva.moque en ello no hay
relación eutr un cometa y el mon ' truo que ataca la luna; el monstruo s
pre
en
ta como tf)il, ya como león ya como serpiente. o. pare que Mon–
te ino ., al redactar
e
ta parte
d
su libro,
ha
aprovechado la mi
ma
fuent
que Oobo, tal vez a e
t,
mi mo; llegamo a esta conc1u. ión por la emejan–
za de ambo. párrafo ·
J
1
or
nn
detalle
e
pecial : ninguno de lo otro cro–
ni
·ta
p
rnanos men iona una -ierpe como agre 'Orad la lnna, ni tampo–
co a.pare
e,
en otro punto de la mitología ndamericana, un ofidio en tal
ca.rá.ctr,
i
ndo lo
trau
cripto párrafos de Oobo
y
Monte inos, los úni–
cos - por lo meno ha
·t(L
la
fecha - en lo ' cuales el eclir e lunar e ex–
plicado ·orno
ataque a
la
luna por parte
d
un :ficlio.
Es
cierto que,
a
excep ión
d
Cob y :Monte
il
os ningún otro croni. ta peruano tampoco
iu lica.
nn
f
lino corno agre or
d
la luna, pero en
r
omp
u "a
de el,; ta fal–
ta puede ·ita1·\_e
la
mitoJo
·ía
·omparativa de mucLa regione del mundo
y tambi
/n
ele Sudam rica
~
gún
la
cual los eclip
·e
,'Oll atribuído
a
la
a.u e1rnza
de un felino mon trnoso.
H
mo apuesto, por consiguiente
(ver arriba pá,g.
163),
qn
el
clvuquichincha-y
o «felino le oro», vist
en nue tra con telación
el
1
Escorpión
(y
strelJa v cina. ), debe Lab
r
¡; ido con iderado como el autor de lo eclip e .
.La interpretcwión .c;egitnda
de lo ecliI '
luna.re, según ]a cual la 1um
e enferma (e llip e parcial) o se muere ( clip total), parece La ·ido
má "
gen ral, por lo
m
no el número
l
~os
comprobantes re
p
ctivo e
ba ·–
tante
cr ecirlo · el má, amplio
'-= e
debe
a
Gm
cila
'O
d
la Vega :
« 1 eclips de la luna. vi 'ndo1a ir n gr ci ndo decían que enfermaba
na de la.
el
·io· trncione.·
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·ha.