FER:'\A:'\DO
IIAYE'
la torn:tse a tener "gana de beh r lech . . d domar un p -
tro. de at ra ,-esar un río...
El patrón
imuló
d rm i1·.
. u pnmo le
acechaba.
Su conciencia alerta e
forzába~e
por rechazar la indolen–
cia. el ma reo agradable. perfumado de calor que le inYadía .
Inopinadamente. Haúl comenzó a hablar. Hugo no
podía preci a r : Estaba
tL~pi
rto o dormido:
-?\o te rí as Hugo.
'o. lo qne ,.
l)'
a contarte
~.,;
muy ri s ible.
guza
la carcajada:
pero puede pa arte
también a ti. Yo mi smo no creí que nunca me pa ara tal
cosa. Y s: n embargo .....
- Pero. hombr.e. qué es ? .. . . Dilo. Yo de nada me
río.
Puedo entrar en concurso con la E finge en cuant
a seriedad.
. ·o me r<'comiencle
tantas co. a ·
y
habla.
- Te dejaré con 'a e ·¡1;na.
1' < ~'
el
la curiosidad.
Pero.
a mi pesar, e to me atormenta,
y
tengo que decírtelo a
ti aunqur mi
insul L~.
e d tuvo de impro,·iso . Lo ojo azule se extravi a–
ban cual si quisieran aprehender una imagen del ictll! c::1:te.
--\-aya. para que lo sepas ... .. Estoy lo qne nunca
en mi Yicla : enamorado.
- D: quién? Se puede "aber? .\quí en la hacienda?
Raúl. estás lo,o.
-. \quí . Hugo.
a~p1í
en la ha::ienda. . Loco.
i señor.
rematadament..:
lo: o. Y cr . o que mi locura no cederá ni
con tu
pr~
sencia. No se qué hacer.
Estoy enamorado.
Repetía la fra5e con amarn·or reconcentrado. el gesto tur–
bio, febril.
Volvía a repetirla como si encontrara en ese
'acto una ignorada complacencia.
Ese ritornello que le la -
timaba el alma le traía al 1111 mo ti empo un hien infinito.