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-13-

Por los años

1902

y

1903

realizó un "Viaje arqueológico en

Ia

re–

gión

id:e

Anda:lgalá" que conocía desde •años atráJs, y estudió

la

al–

farería gris

y

negra grabada

y

pintada de Chaquiago, objetoe. de

piedra ·del mismo lugar, la alfarería tricolor de Pilciao y la negra

grabada de Huasan. (7). Al analizar esta última

y

encontrar en

ella nuevamente el felino .policéfalo, no pudo menos de soriprenderse

de que los indígenas 'hubiesen

inventado

semejante monstruo

y

for–

muló la hipótesis de que estas ideogr.afías no fuesen producto awtóc–

tono de los diaguitais. (8).

Sintió igual perplejidad frente a la alfarería llamada de Santa

María, principalmente ante las grande's urnas funerarias o ceremonia–

les para párvulos, cuyas características son:

la

serpiente, el aves–

truz, ,el sapo

y

los zi:g-zagis geométricos.

En

su ·examen •de "Tipos ·de alfarería en la región Diaguita-Cal–

chaqui" (9) reconoció en las urnas que acabamos de ci.tar

la

pro–

cedencia de una! cultura anterior a la de ·10s Incas, sin atreverse a for–

mular comparación alguna

y

ijo: "¿Quiénes fueron los inventores

de este tipo de urna? EUas or¡.:propias del ver.dadero valle Calchaqui

y

no parece que se extralimiten a l©s otros valles ,que lo rodean, a

saber, de Tinogasta, e Belén, d Andalgalá, Pueblos de Catamarca

o de La Rioja; ni ampoco a los llanos de Tuc:umán, Santiago etc.

Objetos de cerámica bastante eritorios por su factura artística en

todos esos ·lugares pueden desenterrarse, pero las urnas ceremo–

niales o funerarias del .tipo que hemos estado describiendo no g¡alían

de la región encerrada por las cordilleras de Aconquija, Atajo

y

las

que se levantan hacia el poniente hasta el lugar de

la

puerta de Be–

lén : es como para creer que responden a una cultura anterior a la

de los Incas que allí fué arrinconada cuando se vino abajo aquel

primer imperio del Perú del cual nos habla Montesinos en sus Me–

morias".

De&de entonces las excavaciones han demostrado la existencia

de olas urnaE de tipo Santa María en otras provincias, lo que ha puesto

de manifiesto la impropiedad del término con que hasta ahora siguen

designándose, pero nada se ha adelantado acerca de su filiación. En

las numerosas obras ilustradas aparecidas en los últimos tiempos

y

en

(7)

Véase R. M. L. P . Tomo XII. Año

1go6.

J

fa rería .negra .

(8)' Véase lámin a VIII fig .

1

un t ipo de al-

(9) Véase R M. L. P., Tomo XV, año 1908.