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del Hijo, y
del
Espiritu Santo, Au q uina,
Y
okansa, Espí·
ritu Santonsa sutipana. Dióle de comer y también plata,
mankka ehur ana, co
1
lke r aqu i churana. La partícula
sti
sirve para juntar oraciones: v. g. los que temen a Dios, tie–
nen tristeza por sus pecados;
y
tu, pecadorazo, te huelgas
y
ríes?
Dio, a
ajhsaririnacajh huchapata khicbusipjhe ,
llaq uisipjhe;
buma~ti,
huchjbtara, chcbipista, la–
ru
ta?
CONJUNCIONES DISYUNTIVAS. Tú eres el cacique
de este pueblo o su hermano, humajba. aca marca mall-·
c u cancta, mich cbca mallcona
ullca13 a cancta?
Muchas veces entran muy elegantemente las partículas dubitati–
vas; como tu has hurtado ese caballo o le has comprado? Hu- ·
majha uca caballo luntbatastacha. mi cbcbca alas–
t acha~
o siplemente como ahora se dice, humajha u ca
ca ballo lunthata sta, micbchca alastati?
Muy de ordinario esta disyuntiva sirve para las interroga–
ciones, y entonces le corresponde otra partícula
cha:
v, g. quieres
ir al cielo o al infierno? alajbpacb aru saraña muntati,
mankhapacha rucba?; ve a saber si Pedro ha venido o
no, P edroj h hutiti ban.icba, uñjh ánima; está por ven–
tura alguno enfermo? diremos: khiticba usu?; debes a al–
guno? bakena manupatacha.? en las cuales oraciones se
entiende la conjugación
michca.
CONJUNCIONES ADVERSATIVAS.
Paña, sa,
aunque:
Aunque conlieses
todos tus pecados, si no quieres enmendarte,
ninguna cosa vale tu confesión, paña
hke
bucban a cajha
confesa sí s ina, bani huan ij ha sasinsti
casiquiw~
confe asiwimajh h a niu hakhuquiti ; aunque los con–
denados lloren hasta no más, los demonios no les tendrán lás–
tima; paña mankbapachanquirinacajb cunasa wa–
rari íppana, ,s upayanacajh haniu c a tasa kbuyapa–
y aa s pa ti. Aunque me mate, en tí esperaré, paña hiway=
a t as , humagui uñihás ima.
De modo que esta partícula rige gerundio de genitivo,
cuando es uno mismo
el
sujeto, y cuando son varios y diferen-