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(ó
de Corpus Christi,
ó
del sagrado Corazón), de la
.Asunción de la Santísima Virgen
y
Todos los Santo ;
en el tercer año empezarán
:í
comulgar en estas mi -
mas fiestas;
y
frecuentar:ln los Sacramentos en el cuarto
aíio. Decimos,
á
lo menos cinco veces por aiio, para
dar amplitud
á
que los niños que tienen disposición,
se acerquen
m:ís
veces
:í
los santos sacramentos, por
ejemplo, cada mes
1.
.Así se conseguiní que los indio
1
AJ recomendar que se acostumbre
á
los niños
á
reci–
bir los santos Sacramentos de la Penitencia y Eucaristía en
las fiestas indicada , nos fundamos en el Rit. Rom., que dice
(Tit. IV, 2 : "Parochus summum studium in eo ponat, ut po–
pulus sibi commissus sanctissimre Eucharistire Sacramentum
sanctc frequenterque suscipiat, prresertim in maioribus anni
solemnitatibus." Pues ¿no son acaso las más solemnes las
fie tas de la Natividad, Pa cua y Penteco tés, en que se cele–
bran los miste1;os principales de nuestra Redención y Santi–
ficación? La Asunción de la Santísima Virgen es la primera
fie ta especial que la Iglesia, de pués del Conc. de Éfe o
(431 .
celebró en honor de la Madre de Dios, y al mi mo tiempo
· es la má gloriosa para la Reina de los cielos. Fiesta so–
lemne es también la de Todos los anto , ele los innume–
rables bienaYenturados cuyo re plandor glorioso es incom–
parablemente mayór que el de los astros más luciente .
Conviene, pues, celebrar esta fiesta del modo mejor. Y ¿de·
qué manera mejor e podrá venerar
ñ
lo Santos que con un
corazón purificado por el Sacramento de la Penitencia y
transformado por la Sagrada Comunión? Con esta Comu–
nión e puede socorrer al mismo tiempo
á
las almas del
purgato1;0, cuya conmemoración se hace el día siguiente
á
1
la fie ta de Todos lo Santo . Los indios ponen en el día
:f;.
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