Table of Contents Table of Contents
Previous Page  41 / 298 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 41 / 298 Next Page
Page Background

DE LA liiSTORIA CONTEMPORÁNEA

37

-Dispénseme usted, señora, exclamó Godofredo.

La señora de la Chanterie miró á su nuevo hués–

ped y vió en su rostro tal expresión de pesar, que le

hizo un signo amistoso: Después de haberse enjugado

los ojos, recobró en seguida la calma que la caracted–

zaba.

-Don Godofredo (ya sabe usted que sólo le nom–

braremos por su nombre de bautismo), está usted

aquí enmedio de los despojos de una gran tempestad.

Estamos todos aquí heridos y atacados en nuestros

corazones, en nuestros intereses de familia ó en nues–

tra fortuna, por ese huracán de cuarenta años que ha

derribado el reino y la religión y que ha dispe rsado

los elementos de lo que constituía la antigua Francia.

Palabras indiferentes en apariencia nos hieren ó nos

evocan tristes recuerdosl y ·tal .es la razón del silencio

que reina aquí. Rara vez nos hablamos de nosotros

mismos; procuramos olvidarnos, y hemos encontrado

el medio de substituir nuestra antigua vida por otra

vida. Después de su confidencia en casa de Monge–

nod, me pareció ver alguna semejanza entre su situa–

ción de usted y la nuestra, y por eso decidí á mis

cuatro amigos á que le recibiesen á usted entre nos–

otros; por otra parte, precisábanos encontrar un monje

más para nuestro convento. Pero (qué va usted á ha–

cer~

Es imposible entregarse á la soledad sin provi–

siones morales .

-Señora, al oírla á usted hablar de ese modo, me

consideraré muy feliz si usted se digna ser el árbitro

de mi destino.

-Habla usted como hombre de mundo

y

quiere

usted adularme á mí, que tengo ya sesenta años, re...

puso. Querido hijo mio, sepa usted que está enmedio

de gentes que creen ciegamente en Dios, que han

sentido su mano y que se han entregado á él casi tan

enteramente como si fuesen trapenses . tHa ob¿ervado

usted alguna vez la seguridad profunda del verdadero

sacerdote cuando se ha entregado al Señor, cuando