DE LA HISTORIA CONTEMPORÁNEA
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))La verdad la defenderá y á ella deberá su indulto.
))El proceso juzgado por la audiencia criminal de
Alenc;on,__ comó t-odos los procesos en que se encuen–
tra un gran número de acusados reunidos para un
complot inspirado por el espíritu de partido, ha pre–
sentado puntos sumamente obscuros.
))La cancillería de Su Majestad Imperial y Real
sabe hoy á qué atenerse respecto al personaje miste–
rioso llamado
El Comerciante,
cuya presencia en el
departamento del Orne no ha sido negada por el mi–
nisterio
~blico
durante el curso de las sesiones, pero
que el fiscal no juzgó conveniente hacer comparacer,
sin que la defensa tuviese facultades para cit-arlo ni ·
poder para encontrarlo.
))Como saben ya la audiencia, la prefectura, la
po~
licía de París y la cancillería de Su Maj estad
lmpe~
rial y Real, este personaje es el señor don Bernardo
Polydor Bryond de las Tours-Mesnieres, corresponsal,
desde
1794,
del conde de Lille, conocido en el extran–
jero como barón de las Tours-Mesnieres, y en los
fastos de la policía
paris~e
bajo el nombre de Con-
tenson.
-
))Es un hombre excepcional, un hombre cuya no–
bleza y juventud han sido deshonradas por vicios tan
exigentes, por una inmoralidad tan profunda, por
ac~
tos tan criminales, que esta infame huída hubiese ter–
minado indudablemente en el patíbulo, á no ser por
el arte con que supo desempeñar su doble papel, in–
dicado por su doble nombre. Pero cada vez más do..
minado por sus pasiones, acabará por servir pronto
en las últimas y más degradadas filas del crimen , á
pesar de su notable instrucción é innegable talento.
)>Cuando la perspicacia del conde de Lille privó
á Bryond de·manejar el oro del extranjero, quiso salir
de la arena ensangrentada en que sus vicios Jo habían
arrojado.
))~No
era bastante productiva su carrera? tfueron
acaso los remordimientos y la vergüenza lo que lleva-