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cuales s

e mantendria la pureza de la

y

la santidad de cos.

tumbr.es

. Dios decide en los concilios, por el organo de los

padres, l

o que es mas conforme al santo evanjelio.

Es menester arrojarse

á

los pies de

J.

C. S.

N.

para leer

con paciencia lo que este nuevo Apóstol, nuevo padre de la

Iglesia, este conde dogmatizante, escribe sobre la deflnicion

y

autoridad de los concilios.

[.] "Asi pues los concilios ecu.

menicos, ni son, ni pueden ser otra cosa, sino el parlarr.H' ll·

to por decirlo asi,

ó

los estados jenerales reunidos por la au·

toridad y bajo la prudencia del soberado. Donde quiera, que

hay un soberano y en el sistema católico lo hay i1wontesta.

blemente, no se pueden juntar las asambleas nacionales sin él.

Luego, que este ha dicho veto, la asamblea queda disuelta,

o

su fuerza lejislativa suspendida; y si ella se obstina, hay re–

volucion". Ese trozo del libro contiene enormes errores con.

tra la piedad, el sistema de los g;ibiernos seculares y coÓtra

el evanjelio. Se contradice con el plan mismo de la obra: va.

mos por partes. Concédame el Señor serenidad y luz.

EsTAS comparacirmes del gobii;irno de la iglesia con las

sociedades Roliticas producen terribles e nsecuencias.

J.

C. di–

jo, que su rein

no e a (le e te mundo.

, ) Las leyes c1v1-

les seculares no

on

1

:r

mismas del evanjelio en su pureza.

En las monarquías tiene Montesquieu por

pri~1cipio

fundamen·

tal el honor• e

las

públi

a~

la virtud, llaman o asi al amor

de la patria; e e despofi mo el temlin·. En nuestra rclijion, el

fundamento consiste en la humildad, mansedumbre, abnegacion

de si mismo, prescindencia en lo temporal, perdon de las in–

jurias. [ \] iEn que codigo político halló el conde esas reglas?

su comparacion es sumamente inexacta.

SoN los concilios parlamentos

ó

estados jenerales, que se

unen, se suspenden, ó se disuelven á volun1ad de los sobe.

ranos: ellos tienen un veto absoluto. Donde hay parlamentos

y.

estados jenera'les no puede haber absolutismo permanente.

Sera momentáneo

y

conducirá

á

los Stuardes, al uno al ca–

dalzo, al otro

á

un extrañamiento y perdida de la corona. Lns

parlamentos se reuniran sin él, lo juzgarán

y

castigarán. El

conde no ha consultado

a

los te0Jogos como Silvio, Mulina

y

todos descanzando en Santo Tomas;

ni el reino se hizo para

Ti_c_ª_'P_·

-a.-

0--··–

[ . ]

Evanjelios.

[ ; ]

Evanjelios.