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~Jamos
dicho el.mas solemne, el mas famoso, el que celebró
J
ua.n de liañosca.
d
23 de enero de 1639, quemando doce mercaderes portugueses que resul–
t.'l.ron ser (rara coincidencia!) los mas acaudalados de Lima. (1) Uno solo de
~nos,
·don Manuel Bautista Perez, dueño de
la
morada réjia que todavia se
llama en Lima
L1.
casa de Pilatos (propiedad de
la
familia de
Quirós)
poseia
por si solo una fortuna que equivaldria. hoi dia a mas de un millon de pesos,
y fué el secuestro de sus bienes entre sus deudores del comercio
d~
Chile, lo
que dió oríjen a los disturbios que se suscitaron en Santiago
y
en Coquúnbo
por loa codiciosos alguaciles de los despojadores, segun lo recordarán loa que
hayan leido otro de nuestros opúsculos sobre los salteos de la Inquisicion
americana (2). A otro de los quemados en aquel auto, el
judaizante
(pues asi
se llamaba a los portugueses cuando eran
ricos),
doR Diego Lopez de Fonse–
ca, le acusaron de que en el umbral de. su tienda de comercio tenia. enterrado
-estos un relijioso a su lado, para. que le exortase a bien morir i un fr.milar de guard&.
Los
reconciliado!
juda.isantes, con Sambenitos, i familiares a sus lados. Los
ctUados
do8
'I:Ct'~s,
con corosas pinta.das significadoras de sus delitos. Las
Hechicera$
con corosas bll\11·
c:IS, velas i sogas. Otros, por
blasfenws,
con mordazas en
las
lengua~!,
en cuerpo, descu·
biertas las cabezas i vela-s en
las
manos, todos
en
órden siguiendo unos a otros. Los de
menore¡¡ delitos .adelante i por este órden
loa
demas, quedando los
rdajado8
detras
i
Io.s
DogmatistaJJ
i
ensaíladores de
la
lei de Moisen como capitanes i eanJillos, los ültimoa
con sus
caudtu
sobre
sns corosas,
retorcida.i
i
enrosca.hssignificando
las
falaas proposi·
ciones, de su falso majisterio
i
enBeñanza, con que fueron proce<liendo
hasta
su tablado
que hacia frente con el asiento del tribunal, a cuioa pies avia gradas, donde se sentaron
los ofici'\
l.esi ministros de el Santo Oficio por su antiguedad.
"El tablado de los
penirenciado~
fué
maravilloso,
porque en
sn
medio monteaba
UllD.
media pirámide (que
l.l&
ma.iimedia naranja) ceñida de gradas de medio circulo, quo subian
hasta su estremidad, donde em:uvieron por su órden los relajados.
Los
maeztros dogma–
tistas en las mas altas gradas i los Qtros asentados, como iban bajando i por este órden
las
estat!.UUI
de
lo8
difuntos
i
amentes rdarxados.
Los reconciliados i otros penitentes en
ba.ncos en la plaza del tablado. El alguacil maior del Santo Oficio, tuvo
silb
en la plani.
cie del tablado. Pusose púlpito al lado derecho de el Santo Oficio, donde predicó el
arzo.
hispo
de
las
Filipinas don Fra.i Ignacio de Santivañes, de la órden de mi glorioso padre
San Francisco. Otros dos pulpitos se pusieron a los colaterales de el tribunal en que
leieron los relatores
las
sentencias,
las
cuales no se ponen aqui, por escosar prolijidad,
que fueron varias,
segun
los delitos: solo digo qne
cada
uno de
estoa
porfiades judios
podia
ser
Rabino
en
1lil&
Sinagoga. Celebroae oon
gr:m
majestad, quedando el pueblo,
con no
poco
asombro de los ritos i ceremonias, de estos herejes juda.iiantes
i
delitos
graves que
aJli
se leieron."
¿Son estós los espectáculos
maratillo808
que los
ce11tenari8taJJ
querrian regalar a nues
tro pueblo?
Por
edificar a
los aficionadós, publicamos entre
las
piezas justificativas, un
eatracto
del
célebre a.uto de fá de 23 de diciembre de 1736 de que fuá historiador el doctor Bermudez,
cuya. obra cita abundantema.nte el señor Saavedra. Como
en
ese auto intervinieron
al·
gunos de los jueces de Moyen y en su rehcion se
da.
cabi<b &.detalles qne no tuvimos
la
advertencia de copio.r del proceso
de
aquel, ofrecen
un
marcado interea de novedad.
(1)
Segun iRodriguez Buron, llorente habla
cstcnsamente
de este auto de
fé,
tnn
"'
lna.doaun en
Europa.
(2) El citado en el prefacio con el título de
L(l
'JUt
f ui
la
Iwptilfi.cion
m
Oh.ile,
1862.
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