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-J.
:ministrar frutos abundantes
á
los
que
viven juntos
pa·
ra ser felices, seria mas azarosa
y
su existencia mas fu..
nesta, que la invasion de los bárbaros, .que al eorrer
de los tiempos acababan sometiéndose
á·
la
civili~acion
de los pueblos conquistados. La fuerza moral lo con–
vierte todo en su sustancia
y
le infunde su espíritu.
Y
a
se ha visto, que el bien mismo que hacían los pa–
dres, era en servicio propio, en utilidad de la compa-.
ñia, cuyo interés no era
por
cierto el de
la
sociedad
civil.
142. Al tratar de los jesuitas
y
sus cosas, se nos
ha presentado una prueba espresiva, que aunque por
sí sola no b:::tstaba
á
instruir
y
convencer, era muestra
inequívoca, síntoma infalible, de que no tenían ellos
que contestar ni como satisfaceT;
y
este síntoma, esta
muestra ha sido-la
tenaz negativa
de hechos incuestio–
nables: n1iserable negativa, que los entregaba
a
ver–
guenza infan1ante,
á.
vista de sus propios documentos,
casi de su propia confesion.
U
na pertinaz negativa da
JYnuy mala idea de las personas .que,
á
sabiendas del
mal cometido·, se sostienen en negarlo, porque tiem–
blan en presencia del descrédito, sin embargo de co–
nocer que lo merecen. Mas ¿acaso la negativa es jus–
tificacion, ni disculpa siquiera?
¡Estraordinaria eondicion, singular
privih~jio
de los
padres jesuitas! Cuando tenían disputas con otros,
y
eran frecuentes, sien1pre estaba de. su parte
la
razon;
y
cuanto
se
ha dicho contra ellos repetidas veces, to–
do era falso,
calumnioso~
¡Admirable privilejio entre
tantos privilejios!
, ·
.
Volvamos á ruestro pensamiento: lejos de justificar
:ni
disculpar la negativa, descubre una falta mas, una
nueva culpa, un orgullo intolerable, que présta argu.–
mento poderoso
y
sin contestacion. Porque negar una
culpa probada, .es reconocer .que seria cul11a en quien.
la hubiese con1etido: ·de suerte que la pertinacia·de la
negativa equivale á una
verdadera ~
confesion; confe-H
sion arrancada,
y
desnuda del mérito que hubiese
te-
nido siendo voluntaria.
:
Pero
hay
en los padres una circunstancia, que hace
mas orin1inal su negativa.. No niegan como los demas,
que interiormente se vituperan
y
averguenzan; niegan
apoyándose
~n
sus fabricadas reglas d.e moral, di¡ijen
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