233 / 388
2'60. Y
blen ahora:
¿podrct ·
soste11ers·e
con
juicio
"rr'l.editado
y
concienzudo, que la compañia de
J
esus sea
favorable
ó
adversa
á
las Naciones? Para ser acepta–
-da una ·corporacion ·cualqui·era dentro de la
gtat.t
cor–
poracion del Estado, dehe tend'et al mismo obJeto, le–
jos de c:ontradecido . .Si lo prin1ero, S'·era útil; si lo se–
gundo,
perjudicial; y si ni uno ni otro, será inútil
ó
es_.
tará de mas,
por la
fh·erte ra,zon de
no
po-der fnndar
~u
existencia.
Nadie con tradirlt ab1ertam·ente
el
pensamie11to que
l\,cabamos de emitir; pero hay quiene-s se presentan con
disfraz y ·fisonomi:a €straña; haciendo
:alarde
de servi–
·cios geueto.sos, que no
lD
son en verdad,
y
ofreciendo
·como
lfi1'edi~os útiles--.....·el~m·entos
repugnantes
á
los
fi ...
nes de la .sociedad civil. Si ·estos títulos sün
~vn1un€s
.á
otras
·Órde~es.,
los tiene
muy
particulares la
compa~
ñia de
.J
esus.
.261.
U
na
so~1edad
que, como no lo han he'Cho las
-demas.,
1
0'culta 'C)iidadosamente sus constituciones, que
f()rza-d-a,
y
al cabo de dos si.glos, tuvo por fin que pre...
sentar á un tribuna.J; sociedad, cuyo general,
á
mas de
dictar reglas, sostituye
8US
comentarios
a
las constitu–
ciones,
~todo
lo manda
y
entiende
:en
todo, aparece
a nte sus súbditos, como si fuera Dios, y su n1anda....
to justo
como
si
fuera de
Dios;
t[tl
superior,
tal
honh