Previous Page  308 / 408 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 308 / 408 Next Page
Page Background

--- 3

o

1 -'--'"

so.

guardar1a~ ·

en su real ánilno, para que no se

desa~

creditáran hmnbres _desgraciados; miéntras que Fer–

nando VII conociendo la necesidad de que

el negocio,

por su naturaleza, relaciones

y

trascendencia, debía ser tra·

tado

y

examinado en su consejo, para asegurar el acierto en

la resolucion,

y r8lnitiBndo1o de hecho á su consulta;

r esuelve sin aguardar, sin oir,

y

sin mnplear el1nedio

qqe, á su propio juicio, se necesitaba para obtener el

acierto en su resolucion, y restablece precipitadamen.

te la co1ni:mñia en sus estados.

·

'427. Servirá de nrayor esplicacion

á

las razones

guardadas por Carlos

IIl

en su real :-í.ninw el suceso

siguiente. .. Cuando se ajitaba en Roma el negocio de

la .estincion, se vió pr ecisado

el Rey Ca

rlos á mandar .

componer una n1en1orin, que

esplicá.ra

las cansas del

estraña1niento de España, pa

ra que ella

s fundáran la

necesidad y conveniencia de la estincion de ]a orden

de la compañia, y movieran al circunspecto Clmnen–

te XIV que iba despacio, 1neditando n1ucho. en n1ate-

• ria tan grave

á

sus ojos. "Desde entonces, son pa1ttbra.s

del historiador, dej ó Carlos

III

de reservar en sn real

ánimo las causas del estrañamiento de los jesuitas;por

condescender con lo que, para caminar_ sobre seguro,

anhelaba Clen1ente XIV.>>

Y tan important e

y

útil

fué este n1Bn1orial que,

á

juieio del nüsmo, "pudo su–

plir el estravio de la consulta, que unida al espedien...

te generál por .espacio de cuarenta

y

ocho años, no

figu raba entre sus papeles desde el

16

de E 1ero de

, 1815, cuando

á

la sazon s.e trataba del restablccilnien–

to de los

j ~suitas;)J

]o que

nd

dejará de llarnar la aten–

cion de los lectores: parft el restablecimiento de la

éon1~

pañia faltáron doctunentos que se tuvieron pres-entes·

para decretar su esttañmniento. Será 111uy del caso

notar, que cuando Jos o_bispos españoles aprobaron el

·es.trañan1iento

y

la solicitud

á

la estincion, ascendió

su número

á

treinta

y

cuatro, miéntras que cuando pi–

.dieron

á

Fernando VII el restablecinliento, solo hubo ·

nueve, fnera de dos vicarios capitulares. (324)

'

·

428.

Las

observaciones anteriores no valen única–

mBnte

pa.ra

descubrir la irregularidad co1net.ida er¡

la.