Previous Page  300 / 408 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 300 / 408 Next Page
Page Background

-

2D3-

1:1aña

é Indias; lo que se comunic0 al Virey del Perú

en órden de

11

de Junio del nlismo año. (323) Ni

uno solo de nuestros lectores dejará de advertir, que .

una 1nano bien jesuítica hizo la redaccion del real

decreto-eloj io de los padres esti11guidqs. El alma de

Carlos III murn1,uró clescle el cielo, reprobando la

conducta de su nieto,

y

compadeciéndole por su alu–

cinamiento.

Así se espresaba Fernando VII en su primera épo–

ca de absolutismo, disueltas las cortes del reipo,

y

gobernando él solo por consejo

y

á placer de los ene–

lnigos de la libertad,

y

]os mnigos incorrejibles

y

eter.,

nos ele todo despotismo. Fernando VII estaba domi- ,

nado por el 1nis1no espíritu que Pio VII, fuera de

cierto senti1nieuto comrm que los estrechaba, á cau–

sa de haber sido ambos perseguidos por

N

apoleon,

y

eran ajentes poderosos ele la r eaccion que se obraba.

Los caidos. se levant aron, y estos eran Jos únicos que

hablaban y llenaban el mundo con sus voces, con sus

bulas

y

decretos r eales ele restauracion . Y

¡quién lo

creyera! el Rey estuvo mas fuerte

y

1nas relijioso que

el mismo Pontífice, y llamó enemigos de la compa..

ñia á los enemigos de ]a relijion, y atribuyó á la en,.

vidia, la intriga

y

]a cal umnia, lo que fué obra de la

cuerda

y

n1adura meditacion y severo exá

:rp.en

de

grandes hon1bres para dar consejo á su Rey

. No

se

tenga,

elijo,

'ninguna consideTacion,

á

la prag1nátioa-san.,

cion de nli abuelo: ünpropia y descomedida n1anera

ele esp:resarse un nieto un hij o. Pero tal es una de

las señales qnc descutren al jesuitisrno-c1esapegar

al corazon de los hijos, 1nenguar las dulces afeccio-

• nes de la familia.

§. 2.

o.

418.

Pennítasenos eonsiderar prolijamente la dis–

posicion tomada por Fernando VII, no solo para com–

pararla con la de Carlos III con1o lo hemos hecho con

las letras apostólicas ele Clemente XIV

y

Pio VII,

y

l1acer mérito del resultPuclo ele la comparacion, siho

tambien para contestar

á

los qne han pretendido, que