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pecado, como
una
serpiente de su vieja piel (1).
>>
Entre los
Guebros existían los
patet,
que eran las confesiones dolorosas de
todos los pecados que el hombre había cometido. He aquí de que
manera se hacian: 1.
0
El penitente acudía al
destour,
es decir, el
doctor de l<l: ley ó el sacerdote. 2.
o
Comenzaba por una Oracion
á
Orzmud y
á
su ministro en la tierra. 3.
0
Acompañaba aquella .ora–
cion de la resolucion de hacer todo
~1
bien posible, y de sacrificar
su ser
á
Dios. Este uso se halla consignado en el
Zend-Avesta,
obra
cuya antigüedad, segun opinion de Jos sa.bios se remonta
á
mas de
cuatrocientos años antes de la era cristiana.
La confesion era esta:
«
Me arrepiento de todos mis pecados,
y
re–
nuncio
á
ellos: Dios mio! ... tened piedad ele mi cuerpo
y
de mi alma
en este mundo
y
en el otro. Abandono todo mal pensamiento, toda
mala palabra
y
toda mala obra. Justo juez! espero ser superior al
autor del mal, áAriman: espero que en la resurrcccion, lo que suceda
con respecto
á
mí, será dulce
y
favorable. Así pues, me arrepiento de
mis pecados
y
renuncio
á
ellos.
»
Seguia luego la acusacion minuciosa
de los pecados que pueden cometerse contra Dios, contra el prójimo
y
contra sí mismo : acabada aquella enumeracion el penitente
concluia:
·«
Los pecados que Orzmud ha señalado en su ley, pido per–
don de ellos, con pureza de pensamiento, en presencia .de Orzmud,
justo juez, elevado sobre el mundo
y
el cielo, en presencia de So–
siosch,
y
en presencia del doctor de la ley. Me arrepiento de los
pecados contra mi padre, mi madre, hermanos, hermanas
é
hijos;
de los pecados contra. el prójimo, contra mis vecinos
y
conciudada-·
nos; de los pecados
é
injusticias que puedo haber c01netido contra
toda clase de personas; y en fin., de toda especie de debilidades,
y
de
crimenes premeditados.
»
A esta confesion atribuían los guebros la
remisíon de sus pecados, hasta el punto, que sino podian hacerla
antes de morir, mandaban que la hicieran
~espues
de su muerte (2).
(Í) En las obras del caballero Guillermo Joncs, en 4.
0 ,
t.
III, c. xr, núm. 6't,
y
233.- De Maistre
y
el P. Ventura, en, el lugar cit. -!2)
Zend-A vesta.,
t.
JI,
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