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ese proy0cto, todos los resortes de la adtninistracion
nacional boliviana.
J..1a
fuente primaria de sus
n1as sagradrJs derechos, es decir su soberanía, fué
ree1nplazada por la voluntad omnímoda del santo
padre. Dicho proyecto fne rechazado en
las cá-
1naras legislativas de Bolivia. Para ello bastó qu8
los representes del país cedieran
á
los estúnulos del
instinto de la propia conservacion.
Se encontra–
ron en presencia del dile1na fatal: existir cómo
pueblo soberano ó no existir, y
optaro1~
por lo pri–
nlero.
Rn
1853,
el gobierno del Perú intentó
ce–
lebrar un concordato. · No se pudo, con1o en el
caso anterior, llegar
á
un resultado clefinitivo, por
incotnpatibilidau de ideas, 1niras
y
propósitos entre
las dos potestades. Aden1as de
las
i
nstruc(;iones
dadas al negociador peruano tendentes
á
mantener
á
la República en completa posesion <le los de re–
chos y prerogativas de los reyes de España, en la
cámara de dipntadQs, 22 1niembros presentaron
una proposicion cuya parte dispositiva era esta:
«La
~á
mara no prestará su_ aprobacion
á
pacto ó
~oncordato
alguno que se estipu;e, por el cual pier- ·
da
la nacion, ó se desconozcan
los derechos,
fueros
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costumbres de que se haya en legítima
posesion, tanto por las leyes españolas y reales
cérlnlas promulgadas antes de
la independencia.
como por
las de1naR disposiciones dictada
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