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que la
de Dios para recorrer el
nn~nclo,
siri que
hubiese potlido nunca la tenaz oposicion de los go·
biernos, detener un lTIOlnento su 1narcha
progresiva.~
El1nisn1o estracto oficial, refiriendose
á
la-actitud
del señor doctor José Benjan1in Gorostiaga, uno de
los 1nien1bros mas distinguidos y respetados de
aquella asá1nblea, como clespues lo ha sido en los altos
puestos públicos que ha dePen1peñado, dá cuenta de
su actitud, en esta emergencia) ele este n1odo: » El
señor Gorostiaga dijo que la cleclaracion que se
proponia_, de que la religion católica sea la religion
del Estado, serla falsa; por que no todos los habi-–
tantes de la cónfederacion, ni todos
lo~
ciudadanos
de ella son católicos: puesto que
el
pertenecer
á
la
comunion católica, jan1as babia sido p·or nuestras
leyes un requisito para
obt~ner
la ciudadanía, y que
ni
á
los hijos ele los ingleses, que por el tratado del
año 25 pueden ejercer libren1ente su culto en la con·
federacion , se les ha exigido para
~er
ciudadanos
nativos~
que renieguen la religion de sus padres.
<\Que tampoco pnede establecerse que la re1igion
catóEca es la única verdadera;
por
q~te
es
p~tnto
de
do.rpna , cuya decision no es de la cmnpetenc?:a ele
un congreso político,
que tiene que
respetar la
libertad de cultos segun las inspiraciones de la
conciencia.»
Estos antecedentes fijan claran1ente el espíritu
de las leyes
vigentes~
en
todo lo referente
á
la