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SEÑOR Nl0ESTRO.
h asta resucit·a'r muertos ente r rados cuatro dias habia, me–
dio podridos, y que. despedian de sí· tal hedor,
que
no se
podia
sufrir. Si
l e
dexamos.enpaz, todo el mundo creerá
en
él,
y
los romal'los , que ya nos han ·subyugado, .
y.
hecht9
como sus tributario&, acabarán de destruirnos, se
a.podera~
r án de esta ciudad,
y
ániqu ilarán nuestra nacion. Uno de
éllós,
llamado Cayfas , el cu al era sumo sacerdote
aquel
año, les dixo entonces: Vosotros no en tendeis
de
esto ; ¿No
veis que es interes vuestro que un hombre solo muera ·por
t odo el pueblo, y que .no perezca•toda la
nadori~
Bablaba
·mejor Ca
y
fas de lo que se imaginaba: su ·pensatnüento era
que .valia mas sacrificar
á
Jesus haciéndole morir
\5in
ot t~
motivo, que .porque eón sus milágros atraia.
á
sí
qema.sía–
das gentes, las cuales podrian reconocerle
im
día
por
rey~ .
y
dar ocasion con esto á los romanos
par~.arr:ujnar
el
país
y
el templo; ·y que .así valia ma·s saerificar :un
· ~ol.o
b·o
m–
bre, que todo el puebl:o,
y
prevenir con
l~
muerte
de -úno -
la ruina de toda la nacion.
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Esto era · lo ,que Cayfas queria decir; pero Díos"daba
un
sentido muy diferente
á
lo que decía. Cayfas habló
po;r
su espíritu particular como político; pero al mismo tiem–
po
habló por el ·espíritu de Dios como profeta, en
.calidad
de sumo sacerdote, diciendo que conyenia qu.e Jesus
inu–
riese ' no
~olo
para salvar
á
la nacion jud.áica ., sin.o tam–
bien
á
todo el género humano :
Expedit .vobis
.,
ut unu.r
moriatur homo pro
populo, et
non
tota
gens pereat..
Toma–
da la resolucion, los fariseos
Y.
los sacerdotes
no
pensáron
ya
desde aquel dia sino en ver cómo
hab_ian
.de .qu-itarle
la vida; para
éllo
diéron secretamenté·.Slls órdenes ., para
que en cualquiera parte que estuviesen
·se
le prendiese.
El
Salvador,
á
quien nada le era ocult@, y que segun los eter·
nos
decretos
ne:>
gueria set inmolado -sino en la fiesta
.de
pascua, no se dexo ver mas en público; retiróse
á
u_na
.ciu~
dad cerca del desierto,
á
los alrededores de Betél , .donde
permaneció cerca · de dos meses con .sus :apó.stotes,
pre–
parándoles para
el
escándalo
de
su pasion
y
de su
inue
rte.
Estando ·cerca
la
solemnidad
de
la pascua, en la
cual
Jesus había de consuma·r por el sacrificio
de .su
vida la
grande obra de nuestra redendon , se dispuso
:á
la
muerte
con gozo, y se puso
,en
camino para ír
.á
Je
rusalen .con
un
rostro tan
sereno,
que denotaba
el
ardiente
deseo
que
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