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SENOR NUESTRO. .

·

1'27

pondiéron éllos, escapará de su enfermedad. Llamaba Jesus

sueño á la muerte de Lázaro, porque sabia muy bien que

no le costaria mas el resucitarle, que el despertar

á

un

hombre que duerme, y está sano y bueno• .Entonces Je–

sus les dixo abiertamente: Lázaro ha muerto; y me ale–

gro por vosotros no haberme encontrado

~allí,

á

fin que

vuestra fe sea mas perfecta.

El

Salvador no llegó

á

Betá–

nia hasta cuatro dias despues de estar enterrado Lázaro.

Coma....Betánia esta ba cerca de Jerusalen., habian ido mu–

chas personas de dicha ciudad á consolar

á

las dos herma–

nas en

la

muerte de su hermano. Sabiendo Marta que

lle–

gaba Jesus, corre á encontrarle fuera de la poblacion, y

bañada toda

en

lágrimas, le dice (

lbi.

).

Señor, si hubie–

ras estado aquí, mi hermano no hubiera muerto: pero sé

que eres todopoderoso,

y

esto es lo que me consuela.

Dí–

xola Jesus:

T u,__ hermano resucitar4.

"-Marta le respondió:

que resucitará en el último dia al tiempo de la resu–

rreccion. Yo soy lo resurreccion

y

la vida, replicó Jesus;

el que cree en mí, aunque hubiere muerto, vivirá; y cual–

quiera que cree en mí, no morirá para siempre;

i

creeis

esto~

Si, Señor.,

respondió Marta,

yo creo que vos sois

Cristo

,

hijo de Dios vivo

,

que has venido á este mundo.

Dicho esto, corrió Marta

á

avisar

á

su hermana María,

y

la dixo al oido: El Maestro ha llegado, y pregunta por

ti.

Al oir esto María se levanta, y va

á

encontra1-' á Je·

sus fuera -del lugar, en el sitio en donde Marta le babia

encontrado. Siguiéronla todos los que estaban con élla en

casa , Imaginándose que iba

á

llorar al sepulcro de su her-

1nano.

Luego que hubo llegado al lugar .donde estaba Jesus, se

postró

á

sus pies,

y

le

d·ixo

llor~ndo:

Señor, si hubieras

estado aquí, no hubiera muerto mi hermano. Viendo Je–

sus llorar

á

las dos hermanas, y

á

los judíos que habían

venido, se enterneció hasta derramar tambien él algunas

lágrimas. Al ver esto los judíos, se decían únos

á

ótros:

Mirad cómo le amaba. Algunos dixéron tambien:

i

Este

que ha dado vista al ciego de nacimiento, no podia hacer

que Lázaro no

muriera~

Preguntó entonces el Salvador

dónde le habian enterrado , no porque lo ignorase, pues

todo lo sabía, sino porque queria que los circunstantes

reflexionasen

sobre

todo, para que el milagro les diese