Table of Contents Table of Contents
Previous Page  356 / 396 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 356 / 396 Next Page
Page Background

342

JUEVES PRIMERO

madre de los hijos del Zebedeo:

i

Por ventura, son mas

' rectos nuestros fines, mas puras nuestras intenciones? Sean

nuestras oraciones cristianas, é infaliblemente serémos oi·

dos.

Esta es la gracia que os pido, Señor, haced que yo seá

oído.

J

ACULATO R 1AS.

Domine, doce nos orare.

Luc.

II.

Señor, enseñadnos

á

orar.

lntende voci orationis mete, Rex meus

-et

Deus meus.

Salm. 5.

Dignáos escuchar

mi

oracion, vos que sois mi rey

y

mi

Dios.

QJ

PROPOS!TOS.

r No hay actó de religion mas ordinario que la ora-·

c10n, y quizá ninguno con que Dios sea menos honrado.

En todas partes resuenan las alabanzas delSeñor, yse oyen

los votos que se le hacen;

i

pero el. corazon y el espíritu

l

oran de concierto con

los

labios? ino se puede decir que

se rezan muchas oraciones, pero que se hacen pocas?

Cuando solo se consultara la razon y la idea que se debe

tener~

este santo exercicio, ¿podríamos ver

á

sangre

fria la desaplicacion del espíritu, la tibieza, y muchas ve–

ces la indecencia con que cumplimos con él?

iNO

se nos

podría preguntar si acaso oramos por insultar

y

por irri–

tará Dios? La oracion es una conversacion en que el al–

ma admitida, por decirlo así, é introducida en el santua–

rio, le presenta sus miserias, le expone sus necesidades,

le descubre sus tentaciones

y

sus flaquezas;

y

penetrada

de los mas vivos sentimientos de respeto, de amor, de re–

conocimiento, procura honrarle,· así por su profunda su–

mision á sus órdenes, como por su confianza

y

sus

voto~.

i

Un acto de religlon tan perfecto puede no ser otra cosa

que una práctica puramente exterior? Y si al tiempo que

se trata con Dios, se distrae el espíritu hasta perder volun–

tariamente la devocion interior,

ise

puede decir que se

ora? Arreglad vuestra conducta sobre esta reflexion.