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VIERNES PRIMERO

ni. Audite ergo, domus Israel:

Numquid via mea non est

ce–

qua, et non magis vi<e ''Destrie

pravce sunt

~

Cum enim a·verte–

rit {e,

justus.

a.

jusJitia

ma_,

e~

fecerit iniquita,tem, morietur in

~is:

in injustitia, qua operqtur

est, morietur. Et cum averte–

rit ¡ e

ir:;p_iurra~ impie~ate

sua,

quam operatus est, et f ecerit

judicium

et

justitiam : ip1e ani–

mam suam vivificabit. Consi–

derans enim , et avertens

ie

ab

omnibus iniquitatibus suis

~

quar

operatus est; vita vivet, et non

morietur, ait Dominut om11ipo -

tens.

'

'

zon

los que son

inicuos

?

Pues

cuando el justo se apartare de su

justicia,

y

obrare la iniquidad , mo–

rirá en élla: en la injustkia , que

obró, morirá.

"'(

cuando el impío

se apartare de su impiedad ,, que

c9metió ,

y

obrare la razon

y

la jus–

ticia: él mismo vivificará su alma;

porque volviendo en sí, y apartán–

dose de todas sus iniquidades, que

cometió, vivirá,

y

no

morirá, dice

el Señor omnipotente,

o

NOT

¡1.

,, El profeta Ezequiel fue llevado cautivo

á

Babilonia

ocon '}econías , rey de JHdá,

y

trasladado despues á Mee

" sopotámia, donde le dló Dios el. don de profecía para

,, consolará sus hermanos compañeros en su cautividad.

l..

· "·REFLEXIONES.

La

justicia deJ justo ·estará sobre él,

y

la impiedad del

implo estará sobre él.

Cada cual es para sí en materia de

salvácion.

'l~

ues tras obras nos siguen,

y

no podemos ce–

derlas

á

ótros. Admiremos la sabiduría infinita,del Señor,

y su misericordia sin

lím~tes.

¡Con qué' pa¿iencia tolera

los desbarros de los pecadores! ¡y con qué bondad los re–

cibe cuando vuelven á la casa de su padre! Su gozo , sus

liberalidades, la fiesta que hace á la vuelta de este hijo

pródigo, son tan extraordinarias, que dan zelos al hijo ma–

yor.

i

No debía yo, dice este buen

pa~re,

mostrar el go–

zo que me ocasiona su

vuelta~

Tales son los sentimientos

de Dios para con un pecador penitente.

Rabia perecido:

la obra de mis manos, mi imágen, mi semejanza, ·el

precio de mi sangre, se había perdido; y vuelvo á en·

trar hoy en posesion

d~ e~te

bien.

Rabia muerto.

Era una

alma de3esperada, abandonada

, ~con

la cual ya no con–

taba

yo:

cien veces la habia solicitado, instado, busca-