Table of Contents Table of Contents
Previous Page  367 / 396 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 367 / 396 Next Page
Page Background

DE CUARESMA,

g:s3

ciados, bien presto se olvidan de .v0sotros: un nuevo ob–

jeto, un nuevo patron ocupa vuestro.puesto. ¡Buen

DiQS:,

qué digno de lástima es el que ha contado mucho sohie

un

tal fondo

!

.

·

· . ,.

,

1

'1

PUNTO SEGUNDO.

'

Considera cotno aunque los hombres' fuesen ó ménos

AJngratos ,

ó

ménos injustos y menos mudables, no se debe–

~ia

contar tampoco sobre su créditG y sobre su benevoi–

.lencia.' Los hombres nos pueden servir para adelantarnos ;

mas no para hacernos dichosos. El mayor favor no es

capaz de procurarnos un dia de salud, un cuarto de hora

de tranquilidad, media hora dé vida

i

Qué apoyo es ca·

paz de divertir nuestros tédios

~

i

qué crédito puede con–

tentar

á

un cotazon insaciable? Todo el apoy¡o de lo¡S

hombres no es otra cosa que una débil caña , que ·no sol9

se dobla, mas se rompe. Cuando su voluntad no fuera mu–

dable, ninguna cosa es mas caduca que su duracion ;

i~a­

so son éllos dueños de sus dias? La personí:l sobre quien

cuentas uo puede élla misma contar con. que

es~at'á

maña–

na en vida. HabiePi o desaparecido una vez

est~

apoyq,

i

en qué

ararán todas nuestras esperanzas? Aunqµe hu.–

biésemos de sobrevivir á todos nuestros dueños,

á

todos

nuest

s patronos; Mué socorros pueden darnos á la horF&

de la muerte?

i

qué- bien pueden hacernos para la otra vi–

da? Todo Su poder, toda su benevolencia se

limit~

á este

puñado de dias que hemos de

vivir~

i

y

qué servicios pue–

den hp.cernos durante la

eternidad~

No sucede lo misn;io

con la confianza que tenemos en Dios, ni con fos socorros

y

ventajas que hallamos

en

su servicio. Inmutable, inca–

paz de mudanza' exento de pasiones' la misma bondad, la

sabiduría, la equidad ;; solo nuestra pura malicia puede ha-

.cerle mudar, por decirlo así, respecto de nosotros. En

todo tiempo encontramos en él un fondo inagotable de

bondad

y

de poder, que jamás está sujeto al humor

y

al

capricho: solo Señor de todos los eventos, fuente de todos

los bienes, no podernos dexar de ser dichosos, pe estar

contentos, miéntras estamos en su gracia. Que lOs hom–

bres se muden,

Dios

no es capaz de mudarse; que los hom–

bres dexen de ser,

Dios

subsiste siempre. En él hallamos

Tom. l.

Z