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LIBRO PRIMERO DE LOS REYES.
Saul , cum ego proiecerim eum
Saul , habiéndole yo desechado
ne regnet super Israel
?
Im- para que no reyne sobre lsraél?
ple cornu tuum oleo , et veni, Hinche tu cuerno
1
de :rceyte, y
ut rnittam te ad lsai Bethlche- ven , que te enviaré a Isaí de
mitem : providi enim in filiis
Bethlehem; porque entre sus hi-
eius mihi Regem.
jos me he escogido un Rey.
2
Et ait Samuel :
¿
Quomo-
2
Y dixo Samuél: ¿Cómo he
do vadam ? audiet enim Saul,
de ir? porque lo oirá Saul, y me
et interficiet me. Et ait Domi- hará quitar la vida. Y respondió
nus: Vitulum
qe
armento tolles
el Señor: Tomarás en tu mano un
in manu tua...;t dices : Ad im- becerro de la vacada, y dirás: A
molandum..WUik;e véiil.
*
··
sacrificar al Señor he v>enido
2
•
3 Et vocabis Jsai ad viéti-
3 Y llamarás a Isaf al sacrifi-
mam , et ego ostendam tibi quid
cío
3 ,
y yo te significaré lo que
facias , et unges quemcumque
has de ·hacer, y ungirás a aquel
monstravero tibi.
que yo te mostrare.
4 Fecit ergo Samuel , sicut
4 Hízolo pues Samué.l, cómo
locutus est ei Dominus. Venit- le había dicho el Señor. Y fué a
que in Bethlehem , et admira- Bethlehem, y les causó admira-
ti sunt seniores Civitatis , oc- cion
4
a los Ancianos de la Ciu-
currenfes ei , dixeruntque : ¿ Pa- dad, y saliendo a recibirle, le di-
citicusne est ingressus tuus
?
xeron: ¿Es de paz tu venida?
5 Et ait : Pacificus : ad im-
5
Y respcmdió: Si, de paz es:
molandum Domino veni : san- a sacrificar al Señor he venido:
dificamin1, et ven· te mecum ut santlficaos
s
,
y
ven~d
conmigo
immolem. Sanél:iñcavit ergo Isai para que yo ofrezca la víél:ima.
et fil1os eius , et vocavit eos ad Santificó
6
pues . a Isaí y a sus hi-
sacrificium.
jos, y llamólos al sacrificio.
6 Cumque ingressi essent,
6 Y luego iftie entraron
7 ,
vió
~~
1
MS. 7·
Tu cornatillo.
Los antiguos
usaban de los cuernos de los bueyes para
llev ar aceyte, vinagre
y
otros licores. Y
esta misma costumbre se praél:ica aun por
nuestros pastores.
• Aunque Samuél manifestó una de
las causas de su i,la , calló
y
disimuló la
principal. N unca es lícito mentir ; pel'O se
puede ocultar una verdad,
y
manifestar
otra qoando es importante el secreto. No
estaba allí el Arca ni el Tabernáculo; pe–
ro Samuél inspirado del Señor era supe–
rior a las Leyes rituales , y no se limitaba
a lugar para ofrecer sacrificio.
3
Al convite que se ha de celebrar de
las carnes de la víél:ima.
4
Porque y a no se dexaba ver en pú-
blico,
y
porque no sabian quál podia ser
la causa de su venida. El Hebréo dice que
se asustaron , temiendo sin duda que les
traeria alguua mala nueva.
s
Lavándoos o mudándoos los vesti–
dos, y guardando continencia;
Exod.xiX.
14.
15. porque ninguno podia acercarse
a participar de los .manjares sagrados , si
babia contraido alguna impurezª legal.
6
Es verisímil que encargase particu–
larmente a Isaí
y
a sus hijos que se purifi–
casen
y
preparasen para el sacrificio.
7
En la sala del convite,
y
que Samuél
vió a Eiiáb que era el primogénito de Isaí,
deslumbrado sin duda por su noble ayre,
estatura
y
gallarda presencia , dixo en su
·interior { ¿Si será este el que el Señer ha