.
LIBRO QUARTO DE LOS REYES.
I
4 Desceodit • , et lavit in
Iordane septies iuxta sermonem
viri Dei , et restituta est caro
eius , sicut caro pueri parvuli , et
mundatus est.
I
5
Reversusque
ad
virum
Dei curo universo comitatu suo,
venit , et stetit coram eo , et
ait : Vere scio quod non sit
alius Deus
in universa
terra,
nisi tantuml"in Israel. Obsecro
itaque ut .-liccipias benediétio–
nem a servo tuo.
16 At ille respondit : Vi–
vit Dominus , ante quem sto,
quia
non
accipiam. Cumque
vim faceret , penitus non ac–
quievit.
17 Dixitque Naaman : Ut
vis : sed , obsecro , concede mihi
servo tuo ut tollam onus duo–
rum burdonum de
terra : non
enim faciet ultra servus
tuus
holocaustum aut viétimam diis
alienis , nisi Domino.
' Naamáo
pnrllicado de
S1l
lepra por
el agua del Jordan
,
es una excelente
imágen del Pueblo Gentil , llamado por
un don todo gratuito del Señor a la
fe y
al Bautismo de Jesu Christo. Véase lo
que hemos notado en S. Luc.
JV .
27.
•
A la letra :
Bmdicion
;
como en se–
ña1de mi agradecimiento. Los Prophctas
solian recibir algunos presentes de los que
venían a visitarlos o a consultarlos. Eli–
séo por sí era muy pobre , y tenb ram–
bien un crecido número de discípulos po–
bres , a los quales hubiera sido muy del
caso el socorro de N aamán ; pero no qui–
so recibir nada de un extrangero , por no
exponer su ministerio a que fuese des–
acreditado entre los Gentiles por la me–
nor sombra o sospecha de interes , antí–
cipindose a observar lo que Jesu C hristo
mandó mnchcAlespues a sus discípulos:
a
Luca~
¡y,
27.
14 Fué pues,
y
lav
e·
ces en el Jordan confo
e al m:in–
dato del hombre d
D
os,
y
vol-
vióse su carne como
e un nii\o
pequeñito,
y
quedó
pio '.
15 Y volviendo
1
hombre
de Dios con toda
Sil
comitiva,
fué , y presentóse a él , y dixo:
Conozco verdaderamente que no
hay otro Dios en toda la tier–
ra , sino solo en Israél. Ruégo–
te pues que admitas algun pre–
sente
2
de tu siervo.
16 Mas él le respondió: Vive
el Señor, en cuya presencia estoy,
que no lo admitiré. Y como le es–
trechase fuertemente , de ningu11
modo quiso condescender.
17 Y dixo Naamán: Sea como
tú quieres: mas, ruégote, que rne
permitas a mí tu siervo que lleve
la porcioo de tierra que cargan dos
mulos
3 ;
porque no ofrecerá tu sier–
vo holocausto ni víétima a dioses
extrangeros, sino al Señor
+,
Gratis accepisti,
~ratis
date.
M ATTII.
x. 8. y lo que prj(licó
rambien S. Pa–
blo por no poner el menor obst.ículo a
los progresos del Evangelio.
Ador. xx.
33· 34·
3
MS. A.
D os cargas
d~
1M
bulias
burdouu.
Muchos
Cllri~tiJnos
ionit.tron
esta devocion de N aam:ín , llevando a sus
paises tierra de Jerusalem. S.
GRI!GOR .
T u
RON.
de Glor. M"rt.
Lib.
1.
Gflp.
TI.
4
El designio de N•nán era hacer
de esta tierra un Altar
31
Señor. Como
por sus empleos no podía abandonar 1 ..
Sy ria , y por otra parte estJba resuelto
a no adorar otro Dios que
el
verdadero,
se propuso este medio de vivir en comu–
nion con sus Propheras y fieles adorado–
res. Eliséo contento con su
f.:
y con la
buena disposicion de su corazon , np le
habló ni exigió de él 1 .. circuncision ni