LIBRO TERCERO DE LOS REYES.
Regem :Si dederis mihi mediam
bre de Dios: Aunque me die-
partem domus tuae , non veniam
ras la mitad de tu casa, no
iré
tecum , nec comedam panem, ne-
contigo, ni comeré pan , ni be-
que bibam aquam in loco isto:
beré agua en este lugar
1 :
9 Sic enim mandatum est
9
Porque así me fué manda-
mihi in sermone Domini prae-
do de parte del Señor que me dió
cipientis : Non comedes panem,
esta órden : No comerás pan, ni
neque bibes aquam , nec rever-
beberás agua, ni te volverás por
teris per viam qua venisti.
el camino por donde veniste.
10
Abiit ergo per aliam viam,
IO
Fuése pues por otro camí-
et non est
r~11ersus
per iter quo
no, y no volvió por el mismo por
venerat in
~ethel.
donde babia ido a Bethél.
1 1
Pr~hetes
autem quidam
1
r Y moraba en Bethél un ·
senex habitabat in Bethel , ad
Propheta anciano .. , a quien vinie-
quem venerunt
filii
sui, et narra-
ron, y le contaron sus hijos todas
verunt ei omnia opera quae fece-
las cosas que había hecho el hom-
rat vir Dei illa die in Bethel: et
bre de Dios aquel día en Bethél:
verba quae locutus fuerat adRe-
y
refirieron a su padre las pala-
gem narraverunt patri suo.
bras que había dicho al Rey.
12
Et dixit eís pater eorum:
12
Y su padre les dixo: ¿Por
¿Per quam viam abiit? Osten-
quécaminosefué?Ysushijosmos-
derunt
ei
filii
sui viam per
tráronle el camino por donde se ha-
quam abierat
ir Dei qui vene-
bia vuelto el hombre de Dios que
¡·at de luda.
babia venido tle
J
udá.
13 Et ait .filüs suís : Sterní-
13 Y dixo a sus hijos: Apare-
te mihi a 'aum. Qui cum stra-
jadme el asno. Ellos lo aparejaron,
vissen't , ascendit;,
y
montó sobre él,
14
Et abiit post virum Dei,
14
Y fué ef!.Pusca del hombre
et invenit eum sedentem subtus
de Dios, y hal<G'1e
3
sentado deba-
~
1
Para dar un testimonio mas auténti–
co del horror que le causaba la impiedad
de este Pueblo y de su Rey.
•
El nombre de este Propheta segun
el Caldéo era Miquéas , distinto del que
con el mismo nombre tiene lugar enrre
los doce menores. Los Intérpretes con S.
AcusTIN
y
S. GaRÓNYMO creen comun–
mente que lo era del verdadero D ios , y
así se infiere de todo el contexto ; pero
las revoluciones que habia visto en la casa
de Israél tenían muy flaca y debilitada su
fe.
Lo que le contaron de la prediccion
y
de los milagros del hombre de Dios veni–
do de
J
udá , excitó en él vi vos deseos de
verle , y de conversar con él. Corrió en
5U
seguimiento , y como ve!a que ni por
ruegos ni por instancias conseguiría ha-
cerle volver pasos atms, creyó neciamente
poder llamar la menlira a su socorro, por
el grande deseo que tenia d.: llevarle , y
tenerle consigo. Puede ser tambien que se
persuadiese que
!.1
probibicion expresa que
Dios le babia hecho de comer en la Ciu–
dad de Bethél , no se debia entender sino
con los de la casa de Jeroboam ,
y
de los
que seguían su falsa rcligion. Por
pmz
se
entiende todo lo que comunmenre sirve
para alimento del hombre, como
ya
he–
mos notado en otros lugares.
3
MS. 8.
E trob61o
sentado baxo de
una encina , segun la voz
~7!:1
eláh
del
texto Hebréo, que los
LXX.
vierten siem–
pre por .;,
Jpiis ,
qu~rcus.
Pero S. GeRÓ–
NYMO en su version Latina la trasl ad6 unas
veces por encin,¡, otras por terebintho.