LIBRO SEGUNDO DE LOS REYES.
4
¿ Quis me constituat Iudi–
cem super terram , ur ad me ve–
niant omnes qui habent nego–
tium , et iuste iudicem?
5
Sed et curo accederet ad
eum horno ut salutaret
illum,
· ext~nClebat
manum suam , et ap–
prehendens osculabatur eum.
6
Faciebatque hoc ómni Is–
rael venienti
ad
iudicium ut
audiretur a
~ege
: et sollicita–
bat corda virorum Israel.
7
Post quadraginta
autem
annos , d ixit ·Absalom ad Regem
David : Vadam , et reddam vo–
ta mea quae vovi Domino in
Hebron.
'
8 Vovens enim vovit ser–
vus tu!ils , cum esset in Gessur
Syriae, dicens : Si reduxerit me
Dominus in lerusalem , sacrifi–
caba Domino.
9 Dixinque ei Rex !David:
Ce aquí la
ersofla de u
revoltoso con
ánimo de excitar turbacione en el Esta–
do. A este fin inrenta desacreditar el go–
bierno,
y
tachar
G
principal obligacion de
tln R ey , que es haGer justicia a su Pueblo
y a los que vienen a pedírsela , y a
Im–
plorar su proteccion.
' MS.
3· A omillalle.
Ab~alóm
le be–
saba, haciéndole mil caricias ,
y
tratándo–
le con muestras del mayor afeél:o , con
la
mira de ganarles el corazon , y de que
se retirasen de él , prendados de su afa–
bilidad y agrado.
• Atraía , arrebataba ; y el texto He-
1bréo :
Y !obaba
;
porque los enagenaba
de su senot natural que era el Rey , a
quien debian ellos guardar fidelidad , y
mucho mas el mismo Absalóm.
3
Estos quarenta años se cuentan co–
munmente desde la primera vez que Sa–
muél ungió por Rey a D avid, En muchos
Códices Latinos MSS. antiguos se
lee lo
mismo ; en otros seis , en otros cinco, y
en otros dos. JosBPHO
AJztiquit. Lib.
vu.
4
¡Oh! ¿quién fuera J\lez sobre
la tierra, para que viniesen a mí
todos los que tienen negocios,
y
los decidiese segun justicia?
5
Y quando se llegaba a él
alguno para saludarle
1
1
le alar–
gaba ·la mano , y abrazándole
le besaba.
6 Y lo mismo hacia con todos
los de Israél que venían a que el
Rey los oyese y juzgase ;
y
se a-:
traía el corazon
·•
de los de Israél.
7 Mas despues de los quarenta
años
3 ,
d ixo Absalóm al Rey Da–
vid : Pasaré a Hebrón , y cum–
pliré allí mis votos que tengo
hechos al Señor.
8
Porque qua-ndo tu siervo
estaba en Gessúr de Syria hizo
este voto , diciendo : Si el Señor
me concediere volver a Jerusa–
lem, le ofreceré un sacrificio
4 •
9 Y el Rey David le dixo:
Cdp.
'vUI.
y
TREODORET.
Qudest. XXVITT.
leen :
Pasados ya quatro aiios
,
despues
de la vuelta de Absalóm a la casa de su
padre. Se debe
a~vertir ,
que ántes de la
construccion del Templo se acostumbra–
ban ófrecer sacrificios en todos los lu–
gares que la religion de los Patriarchas
babia consagrado , como Hebrón , Bethél;
Bersabee. Abraham
y
los otros Patriar–
chas estaba!) enterrados en Hebrón ,
y
Absalóm habia nacido alll. Supra
m.
j.
Absalóm queriendo dar algun color a su
salida de la Corte , pretextó tener que ir
a Hebrón para adorar aiiJ al Señor :
y
este Príncipe tan impio como desnatu–
ralizado se puso la máscara de la reli–
gion, quando creyó que podia ser con–
ducente a sus designios ambiciosos , así
como habia tomado la del arrepentimien–
to y surrtision para reconciliarse con su
padre.
4
En H ebrón , lugar en donde David
l1abia
recibido la uncion Real , y habia
sido proclamado Rey por todo Israél.