LIBRO PRIMERO DE LOS REYES.
universo Israelí venientium in
Silo.
r
5
Etiam antequam adolerent
adipem , veníebat puer Sacerdo–
tís , et dicebat immolanti : Da
mihi carnem ut coquam Sacer–
doti : non enim accipiam a te car–
nero coél:am , sed crudam.
r6 Dicebatque
illi
immolans:
Incendatur prímum iuxta morem
hodie adeps , et(i)tolle tibi quan–
tumcumque desiderat anima. tua.
Qui respondens aiebat ei : N e–
quaquarp : nunc enim dabis, alio–
qu.[n tollam vi.
17 Erat ergo peccatum pue–
rorum grande nimis coram Do–
mino: quía retrahebant homines
a sacrificio Domini.
r8 Samuel autem ministrabat
ante faciem Domini, puer , ac–
cinél:us ephod lineo.
19
!Et tuQica
ar am facie-
bat ei mater s a , q am afferebat
statutis diebus , ascendens ct!Jm–
viro suo ut ·mmólaret hostiam
solemnem.
20
Et benedixit Heli Efca–
nae et uxori eius , dixitque ei:
Reddat tibi Dominus semen de
muliere hac , pro foenore quod
commodasti Domino. Et abie–
runt in locum suum.
21
Visitavit ergo Dominus
Aonam , et concepit , et peperit
t_res filios et duas filias : et ma-
• MS. 8.
Came cocha
,
mas crua.
Lo
que era contra la Ley del Señor ,
L evit.
VJI.
:21. :23. y contra la costumbre.
• El comun del Pueblo era mas reli–
gioso que csros malos Sacerdotes.
3
S.
BERNARDO
Serm.
1.
de Convers.
S. Pauli
dice de semejantes :
Horrendum
dos los de .Israél quarido venian
a Silo.
15 Y así mismo ántes que que–
maran la grosura, venia el criado
del Sacerdote,y decía at que hacia
la ofrenda:Dame carne para cocer–
la para el Sacerdote; pues no toma–
ré de tí carne cocida, sino cruda
r.
r6 Y el que ofrecía el sacrifi–
cio le respondía : Quémese pri–
mero hoy la grosura segun cos–
tumbre, y despues toma quanto
quisieres
2 •
Mas élJe respondía di–
ciendo: No que ahora me la has
de dar; y si no la tomaré'por fuerza.
17 Era · pues muy grande el
pecado de estos jóvenes delante del
Señor; porque retraían a la gente
de ofrecer sacrificio al Señor s.
18
Y el jóven Samuél exercia
su ministerio delante del Señor,
vestido de un ephód
4
de lino.
19 Y hacíale su madre una tú–
nica pequeña, la que llevabas en
los días señalados , quaodo subía
con su marido a ofrecer el sacri–
ficio solemne.
20
Y
bendix~
Helí a Elcana
y
a su muger, y díxole : El Señor te
dé sucesion de esta muger, en re–
compensa de la prenda que has de–
positado en manos del Señor.
Y
volviéronse a su casa.
zr..
El Señor pues visitó a A–
na, y concibió , y tuvo tres hi–
jos y dos hijas :
y
el jóven Sa-
pmitus sacrilegimn
,
quod et ipsorum
vid#ur excedere facinus
,
qui Domino
maiestatis mamts sacrílegas iniecerunt.
+
MS. 8.
Sobrepelliz
o espaldar. Era
todo diferente del ephód del Pontífice.
Exod.
xxVIll.
6.
s Todos los 2ños eo una de las fiestas.