166
LIBRO SEGUNDO DE LOS REYES..
asceodam in unam de Civitatibus
luda? Et ait Dominus ad eum:
Ascendc. Dixitque David: ¿Quo
ascendam? Et respondit ei : In
Hebron.
2
Ascendit ergo David
ct
duae uxores eius, Achinoam Iez–
·raelites, et Abigail uxor Nabal
Carmeli:
3
Sed et viros qui erant cum
eo duxit Dat:..:d si:ngulos cum do–
mo sua : et manserunt in oppidis
Hebron.
4 Vencruntque • viri luda,
et unxerunt ibi David , ut re–
gnaret super domum luda. Et
nunciatum
est David , quod
viri
labes-Galaad
sepelissent
Saul.
5 Misit ergo David nuncios
ad vlros labes-Galaad , dixitque
ad eos: Benedlét' vos Domino,
qui fecistis wdsericordiam hanc
cum domjno vestn> Saul, et se–
pclistis eum.
6 Et une etribuet vobis qui–
dem Dominus misericordiarn et
veritatem: sed et ego reddam gra–
tiam, eo quod fecistis verbum
istud.
1
Hebrón era una Ciudad muy fuerte
en el cemro de la Tribu de Judá.
•
E sta es la segund.1 yez que recibió
DJvid
!.1
uncion de R ey , para la qua!
se valdria sin duda del ministerio del
Pontífice Abiathár. David desde
luego
rcynó sobre la Tribu de Judá, por ser
ellos sus hermanos ;
y
despucs reunió
los cios Pueblos enemigos , que se recon–
ciliaron entrt' sí , y no formaron sino un
solo R ey no y un solo Pueblo. Jesu Chris–
to fué al principio reconocido de solos
los Judíos , que fueron sus hermanos se–
gun la carne; y despues sometió los
Geu~
n
lll/r<J v.
3·
I.
Mad1nb.
11.
57
¿Subiré a una de las Ciudades
de
J
udá? Y le respondió el Se–
ñor: Sube. Y dixo David: ¿A
dónde subiré? Y respondióle : A
Hebrón
'.
2
Subió con esto David y sus
dos mugeres , Aquinoám
J
ezrae–
lita, y Abigaíl muger que fué de
N
abál del Carmelo:
3
Y llevó tambien consigo Da.
vid toda la gente que le acompa–
ñaba, cada uno con su familia: y
moraron en las Aldeas d<! Hebrón.
4
Y vinieron los de la Tribu
de
J
udá , y consagraron " allí a
David, para que reynase sobre la
casa de J udá. Y fué dicho a Da–
vid, como los de Jabés de Galaad
habían enterrado a Saul.
5 Envió pues David mensa–
geros a los de J abés
3
de Galaad,
y
díxoles: Benditos vosotros del
Señor , que habeis usado de esta
misericordia
4
con Saul vuestro se–
ñor , y le habeis dado sepultura.
6 ElSeñor tambien desde aho–
ra os pagará esta misericordia y
verdad
s
;
y yó así mismo os ha–
ré gracias , pdrque habeis hecho
una cosa como esta.
tiles al yugo de su Ley , destruyendo la
enemistad que habia entre estos dos Pue–
blos ,
y
fortnando de uno y otro una
sola Iglesia
y
una sob Grey , de la qua!
él es el Pastor , el Rey
y
la Cabeza.
IoANN. x. 11.
3
David sin duda babia preguntado
:íntes, qué se habi.m hecho los cadáveres
de 6aul
y
de sus hijos , con el fiu de
darles honrosa sepultura.
4
MS. 8.
Esta maura.
s El Señor se mostrará piadoso
y
fiel
con vosotros , segun lo que tiene pro–
nletido a Jos que fueren misericordiosos.