CAPITULO IV.
6g3
et
hic est Anti-Christus, de quo
audistis quoniam venit , et nunc
iam in mundo est.
4
Vos ex Deo estis , filioli,
et vicistis eum ; quoniam ma–
ior ese qui in vobis est , quam
qui in mundo.
5
!psi de mundo sunt: id–
eo de mundo loquuntur, et mun·
dus eos audit.
6
Nos ex Deo sumus. Qui
novit D eum , audit nos : qui ·
non est ex Deo , non audit nos:
in hoc cognoscimus Spiritum
veritatis, et spiritum erroris.
7
Charissimi, diligamus nos
invicem : quia charitas ex Deo
est. Et omnis qui diligit , ex
:
Deo natus est , et cog;l:>scit
D eum.
iJI
8
Qui non diligit, non no–
vit Dcum : quoniam Deus cha-
ritas ese.
·•
tá
en el mundo ; porque hay en el mun–
do muchos Hereges que son sus precur–
sores , los quales piensan
y
enseñan del
mismo modo , seduciendo a Jos incautós.
1
Y habeis véncido al Ante-Christo
" o su espíritu. En el Griego
«rh~f,
a es–
tos
:
y
habeis triumphado de estos que
enseñan tales doél.rinas o del Ante-Chris–
to.
S.
AuG .
Trafl. vr. in
T.
Epist. Iomm.
s
Que es D ios ,
~ente
de toda gracia.
3
Que el diablo
qu~
los mueve
y
los gobierna. Vosotros
Ji.
is resistido
con valor a estos falsos Prophetas ,
no por
vucsrras fuerzas , sino con el socorro
del
que habita en vosotros por su graci ·
que es mas poderOso para protegeros, que
lo es el demonio vuestro enemigo , o
el
Ante-Christo para derribaros
y
pervertiros.
4
l'or esto no hablan ni respiran otra
doélrina que la que es conforme a
la
car–
ne, a
sus . pasiones
y
al
p:~ladar
de los
mundanos ; Jos quales por .esta razon los
escuchan con ah:gria.
l oANN. VIII. 4 7·
i
Luc. x. t6. .El que
conoce
y
ama
te tal es un Ante·Christo,de quien
habeis oído que viene, y ahora ya
está en el mundo.
4
Vosotros , hijitos, sois de
Dios,y vencisteis a aquel ';porque
el que está en vosotros
2
,
es
ma–
yor que el que está en el mundo'·
5
Ellos del mundo son : por
eso hablan del .mundo ',y el mun–
do los oye.
6
Nosotros de Dios somos.
.Quien a Dios conoce, nos oyes,
el que no es deDios,nonos oye: en
esto conocemos el espíritu de la
verdad , y el espíritu del error.
7 Ca rísimos , amémosnos u–
nos a otros : porque la caridad
es de
,píos
~
:
Y
codo aquel que
ama , 'ífe Dios es nacido, y co–
noce a Dios.
8
El que no ama.#
conoce
j
a
Dios :
porqu~
es cari–
dad
7 •
a
D ios
1
y
esrá
unido
con ,él , esc:uchi
nuestra doélrina ; porque sabe que 6:0mos
los enviados de Dios para anunciarles sus
verdades :
y
el
que no
no~
escucha oo es
de D ios.
Y
por aquí se
co~ce
quálcs son
lob!Jspíritus del error o de la verdad. Es.:.
ta regla es general,
y
se exriendc con pro·
piedad a todos Jos tiempos
de
la
I~lesia.
:.
6
E l espíriru de error, es cspHitu de
c~dicia
y
de
am~opio :
el espíriru de
verd24! , es ·
1~
•
de caridad ;
y
así
el
que
am;_,-ze~
ximo es verdaderamente
hijo
de~ ~~e
es verdad
y
caridad ,
y
conoce
y
ama
al sumo bien.
S
AUGUST.
TrnEl.
V I
f.
in
t.
Epist.
Io.mn. n.
4· 5·
1
Es la caridad misma por esencia,
como
es
la sabiduría
y
b.
bondad
y
rodos
los demas divinos atributos. QtJando es–
te Santo Apóstol dice ,
que
la 9ri–
dad es o viene de Dios, hace un grande
elogio de esta virtud : ¿mas qué elogio
puede
ignalar al
que
hace
de
ella quando
dice :
Dios a
caridad? Por
t,mto niugu–
uo dign
:
Yo peco t:01Jir4 un hombre qftm¡..
....