CAPITULO
Vl.
37
sphemiae in Moysen et in
Deum.
12
Commoverunt itaque ple–
bem et Seniores et Scribas : et
concurrentes rapuerunt eum, et
adduxerunt in Concilium,
13
E t statuerunt falsos te–
stes , qui dicerent: Horno iste
non cessat loqui verba adversus
locum sanétum et Legem.
14
,Audivimus enim eum di–
centcm : Quoniam Iesus Naza–
renus hic destruet Jocum istum,
et mutabit tradiciones, quas tra–
didit nobis Moyses.
I
5 Et intuentes eum orones
gui sedebant in Concilio , vi–
derunt faciem eius tamquam fa-
ciem Angeli.
•
1
MS.
E
fitrro1.
arraParon
a
Es–
trvmt.
!!
T. Gr.
p,..rfA¡pHp..a,palabras de blas–
pht<mia.
Corno si roda su ocupacion
y
omplco fuese blasphcmar conrra
el
Tem–
plo de Dios ,
y
contra su santa Ley. Pe–
ro el discípulo no es mayor que
el
Maes–
tro, a quien en otro tiempo habian calum–
niado del m.ismo modo. Por esro profie–
ren estas palabras llenas de desprecio há-
blasphemia contra Moysés
y
contra D ios.
12
Y conmovieron al pueblo
y a los Ancianos y a los E scribas:
y
conjurados lo arrebataron ',
y
lo llevaron al Concilio,
13 Y
presentaron testigos fal–
sos que dixesen: Este hombre no
cesa de hablar • palabras contra
el lugar santo y contra la Ley.
14 Porque le hemos oído de–
cir, que ese Jesus Nazareno des–
truirá este lugar, y cambiará las
tradiciones
3 ,
que nos dió Moy-
sés.
·
I
5
Y fixando en él los ojos
todos quantos estaban en el Con–
'ilio, vieron su rostro como ros–
tro de Angel •.
.
cia
la
persona de Jesu Christo:
L~
hemos
ofdo decir que ese J e.rus
,
salido de una
aldea tan despreciable como Nazarerh,
y
que hacia alarde de ser el Salvador deIs–
raél, destruirá este lugar.
3 T .Gr.T.(
~-3-~,!as
,·o.rtumbres,los usos.
4
Lleno de magcstad
y
de resplan–
dor, como ordinariamente se han mani–
fcst*:lo los Angeles quando han apareci–
do a los hombres.
CAPITULO VII.
•
E stevan responde
m
el Concilio a los Judios
:
Jes tm1estra como sus
mayores bnbinn sido siempre rebeldes a Dios
:
y que al presente lo
eran tambien. ellos , habieudo !Jecho morir al Salvador
,
y
pe,.segui–
do a sus discipulos. Se enfzwecen lr!t J udfos oyendo este discurso.
Estevan vé la gloria de Dios
,
y es apedt·eado. Estando para mo–
rir ntega por
sus
enemigos.
I
Dixit autem Princeps Sa–
cerdotum: ¿Si haec ita se habent?
2
Qui ait : Viri fratres et
1
Entónces el Sumo Sacer–
dote dixo: ¿Si eran así estas cosas?
~
Él dixo: Varone$ herma-