CAPITULO VII.
. 2
r
¿
Servus vocatus es? non
sit tibi curae : sed et si potes
:fieri liber , magis utere.
22 Qui enim in Domino vo–
catus est servus , libertus est
Domini : similiter qui liber
vocatus est , servus est Chri–
sti.
23 Pretio • empti estis, no–
lite fieri serví hominum.
24 Unusquisque in quo vo–
catus est , fratres , in hoc per–
maneat apud Deum.
25 De virginibus autem prae–
ceptum Domini non habeo: con–
silium autem do : tarnquam mi–
sericord iam consecutus a Domi-
no , ut sim fidelis.
~
26 Existirno
·~rgo
hoc bo–
num esse propter instante& ne–
cessitatem ; quoni'}m bonum est
homini sic esse.
z.
Y
no quieras
dex:ule
aun qu:mdo
puedas
,
puesto que la humildad de
tu
t:ondicion te hace semejante a
J
esu Chris–
to, que ptefirió la
~ervidumbre
y
13 obe–
diencia , a la libertad
y
al derecho que
tenia de ser Señor de todos los hombres.
O tros trasladan :
Mas si pztedes lograr In.
libertad por rm•dios lrgftimos, no pierdas
la ocasion
,
aprovGchate de dla
,
puesto
tj_ue Dios te la d?., para
servir
con mas li–
bcrt;~.d
a Christo. Este es cl.lenrido llano.
1
Que por su gracia le ha rescatado
de la esclavimd del pecado
y
del dc–
rnonio.
Liberto
;
otros :
horro u del Se–
ñor.
Esta es
la
verdadera libertad. ·
3
Como que le ha comprado a precio
de su Sangre ,
y
para que renuncie a su
propia voluntad para seguirle.
4
Conservando entera vuestra volun–
tad para haceros esclavos
de
J
esu Chrísto.
O tros:
No os lutgais esclnvos de los hom–
bres
,
sirviéndoles
y
complaciéndoles en
sus
pasionc~
desarregladas.
a Sllpr. vi.
20,
1.
Petr.
r.
19.
Tom. ll.
2
r
¿Fuiste llamado siendo sier–
vo? no te dé cuidado : y si puedes
serlibre, aprovéchate mas bien ' .
22
Porque el siervo que fué
llamado en
el
Señor, liberto es
del Señor • : así mismo el que fué
llamado siendo libre , siervo es.
O.e Christo ' .
23 Por precio sois compra–
dos, no os hagais siervos de hom–
bres •.
24 Pues cada uno, hermanos,
estése delante de Dios s en aque–
llo en que fué llamado.
25 Quanto a las vírgenes no
tengo mandamiento del Señor
6 :
mas doy consejo : así como quien
h~
alcanzado misericordia del Se–
ñor para ser fiel
7 •
26 Pienso pues que esto es
' bueno
8
,
a causa de la necesidad
que apremia; porque
bu~no
es al
hombre el estarse así •.
s Salva la
ft:
y
la obediencia que se
debe a Dios.
6
La virginidad o celibato, como sien–
ten todos los Padres , es materia
de
votó;
mas
¡)O
es precepto o Ley general. Véase
sobre la diiCrencia del precepto
y
consejo
a
S.
AcusTIN
L ib. de Smztl. virg. Cap.
JI
V.
7
Y
este consejo es muy s:mo ,
y
da–
do por aquel a quien el Señor ha hecho la
gracia de hacerle su
fi
~Ministro,
y
que
por ranto
podeis~reer q~c
es segun el
Ji'S–
píritu del mismo Señor.
El
CuRYsÓSTO:<.r.
8
Juzgo pues que el estado de la
~ir-
9~idad
es bueno y excelente ,
atend1d.asJÍs inquietudes , molestias ,
cuid<~dos
y
tentaciones de esta vid:l, que son insepa–
rables del estado del matrimonio. Otros
lo explican de la necesichd de morir ,
y
del breve espacio
que hay
de
vida
para
ganar
la
erernidad.
9
Sin casar.
Y
a estos atribuye S.T Ho-–
:t.fA5
el fruto
centésimo
del Evangelio.
Nn