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EPISTOLA l . DE S. PABLO A LOS CORINTHIOS.
nisi fo rte ex consensu ad tern–
pus , ut vacetis orationi : et ite–
r um revert imini in id ipsum, ne
tentct vos Satanas proptcr incon–
tincntiam vestram.
6
H oc autern dico secundum
,
ind~Igentiam,
non secundum im–
pertum.
7 Volo enim omnes vos esse
sicut meipsum : sed unusquis–
que proprium donum habet ex
Deo : alius quidem sic , alius
vero sic.
8 Dico autem non nu–
ptis et viduis
bonum est
illis si sic permaneant , sicut
et ego.
9 Quod si non se contimnt,
s
No
remeis pagaros mútuamcn.!.
te
el d6ic!cho que tcneis el uno sobre el
otro. \ Téase
S.
AcosT.
Epist.
cxcr x.
:a
T. Gr.
r;
r'm~,
€,
rj
?re_901t1Xj ,
al
n; •rmo
1
a la oracion.
Era una pr:lética que
se observaba muy exll.élamente en los pri–
tncros siglos de la
l glesiJ. ,
abstenerse los
casados del uso legítimo del matrimonio
en tiempo de Quarcsma, en las Vigilias de
Jos Domingos
y
fiestas solemnes del año,
y
quando se disponian para rccib.i_r
el
au–
gustísimo Cuerpo de nuestro Senor Jcsu
C hrisro. Esta misma doélrina debería aun
observarse al presente para entrar en el
espíritu del Santo Apóstol. El ayuno que
añade
el
texto Griego comprchcnde no
¡oJo
la
abstinei'' ia de ciertos maoj:ues
y
una sola comióa ;
ma~tambieo
y
princi–
palmente la de todos
~s
placeres del cuer–
po , y de Jos
~asatiempos
del myndo.
3
De aqut se infiere que los
cas~os
se separaban d.c lecho en el tiempo de éli–
cha abstinencia , para "ivir con mayor
pureza ,
y
méoos expuestos a la tenucion.
Pasado este tiempo , les dice el Apóstol,
vivid como :ímes ; no sea que viviendo
largo tiempo separados , la dificultad que
3intais en vencer Jos deseos desarreglados
de l.t concupiscencia , dé ocasion al de–
monio de tentaros
al
mal.
otro ' , sino de acuerdo por algun
tiempo, para dedicaros a la ora–
cion •:
y
de nuevo volved a coha–
bitar
3 ,
porque no os tiente Sata–
nás· por v uestra incontinencia"'"·
6 Mas esto digo por indul–
gencia , no por mandamien–
to
5 •
7 Porque quiero que todos
vosotros scais tales como
yo
mis–
mo
6 :
mas cada uno tiene de Dios
su propio don : el uno de una
manera ,
y
el otro de otra.
8 Digo tambien a los no ca–
sados
y
a las viudas, que les es bue–
no si permanecen así , como ram–
bien
yo
1.
9 Mas si no tienen don de
_,
·-
4
:M.S.
P or
ti
vr~stro
1to co1Jim;...
mlmto.
5
Mas sobré..csto de que no vivais s.o;.–
parados no os pongo
yo
un mandamien–
to; lo digo solameare por condescenden–
cia ,
y
en arcncion
a
vuestra (lJqncza, aun·
que seria Cosa
ffill)'
loable que pudjcseis
vivir en continencia. Otros trasladan:
Lo
que
digo como
m111
cosa
que se o.s
disi–
mula
y
perdona
;
mas
,10
que se os man–
da.
Sobre las qualcs palabras dice
S. GR
E–
GORIO
Epist.
11
r. Lib.
:r
rr.
que el A–
p6stol no se serviría de estos términos si–
no hubiera en ello alguna imperfcccion,
por quamo no hay queperdonar ni que di–
simular en lo que es justo
y
permitido;
y
así el Ap6col. declar:mdo que perdona,
dá
:1
entender que hay alguna impcrfcc–
cioo en cno ,
y
que para vh·ir santamen–
te
en
el
matrimonio se ha de atender al
ñn principal para el qua! Dios le institu–
yó, y
no precisamente. para satisfacer
J¡
pasion.
6
Quisiera que abrazaseis la contlnen–
cia como yo: mas no todos tienen de Dios
uo mismo don
¡
porque a unos concede la
gracia de guardar pureza
1
y
a otros de
vivir santamente en el matrimonio.
1
Permanezco en el mio
1
qu~
es
el
,enbato , como ha dicho ·ictes.