Table of Contents Table of Contents
Previous Page  290 / 838 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 290 / 838 Next Page
Page Background

J8o EPISTOLA

J.

DE S.PABLO A LOS OORINTHIOS.

huiusmodi : in pace autem voca–

vit nos D eus.

16

¿Unde enim seis mulier,

si virum salvum facies? ¿aut un–

d e seis

vir,

si rnulierem salvam

facies?

17

Nisi unicuique sicut di–

visit D omín us , unumquemque

.sicut vocav

it

D eus , ita arnbulet,

et sicut in omnibus Ecclesiis

doceo.

18

¿ Circumcisus aliquis vo–

catus cst? non adducat prae–

putium. ¿In praeputio aliquis

vocatus est ? non circurncida–

tur.

. 19

Circumcisio nihil est,

et praeputium nihil est : :fed

observaría mandatorum D ei.

20

U nusquisque in qua vo–

catione vocacus est , in ea per.:

roan

ea~

" En tal caso d hombre Christiano o

la

muger Christi:ma quedan libres de la

ley que el Apóstol llama

servidumbre ;

ya

sea de la cohabitacion sola ,como quieren

grandes Theólogos

;

ya tambien cbl vín–

culo como sienten otros. Véase la

Diser–

tnciou en la Biblia

de

CARRJERES

última

edicion.

• J>orquc D ios no pretende que el

C hristian'o esté obligado a vivir en com–

p ailÍa de quien

~:e

con¡fnuo turbe la paz

de su corazon

y

1a

tranquilidad de su es–

p íritu.-._

J

Porque ¿qué sabes

tLÍ

si Dibs se quie–

re valer de

como de

instrumento

f4:a

salvarlos? V é:l.llse semejantes exemplos en

S.

AcusTtN

de Adulter. coniug. L ib.

T.

Cap. x

1 1

t .

Se puede trAducir rambien

con relacioo al verso que precede

,

de es–

te modo : Si

la

parte infiel se quiere sepa–

rar, cléxala que se se?:lre , no re opongas

con pret9xto de que vivien,do con ella se

podria csper:u que la harias entrar en ca–

UJÍno de ¡alud. Y dá la

r2z~t.!

:

Porque

dumbre' en tales cosas: mas D ios

nos ha llamado en paz •.

16

Porque ¿dónde sabes tú,

mugcr, si salvarás al marido? ¿ o

dónde sabes tú, marido, si salva–

rás la muger •?

17

Sino que cada uno como

D ios le haya repartido,

y

cada

uno como Dios le haya llamado,

así ande •,

y

esto es como yo lo

ordeno en todas las Iglesias.

18

¿Es llamado alguno sien–

do circuncidados? que no bus–

que prepucio. ¿Es llamado algu–

no en prepucio

6

? que no se cir–

cuncide.

19

La circuncision nada es,

y

el prepucio nada.t¡S

7 ;

sino la guar–

da de los mandamientos de D ios.

20

Cada 'uno en la vocacion

en que

fuf

llamado, en ella per–

manezca . "

¿qué sabes tz1

t

ntuge,.; si salvarás

.1:

t1'

marido?

¿Y

qué

sabes

tú,

marido

,

si sal–

varás a tu

muger ,

empeñándola a que

viviese contigo?

·

4

Esto es , cada uno permanezca en

aquel estado en que se hallaba quando

Dios le Jlam6 a la fe. Porque

la

Religion

Chrisriana no consiste en mudar de con–

dicion ,

.$ino

en mudar de costumbres

;

!P

destruye

en~l

mundo el 6rden de Ja

vida

civil, sino sola'mente

eJ

pec:ldo y b s oca–

siones del pecado. S. Cua

YSOST.

Homif.

X J JC,

5

De los Hebréos.

6

De los Gentiles.

7

Porque en la

Ley

de Gracia

nada

importa el haber recibido o no la cirCunci–

sion para conseguir la vida eterna. ·

'

Esto se debe entender siendo un es–

tado en que pueda permanecer sin es–

cándalo del próximo

,

y sin ofensa de

D ios. Es una sentencia general con la que

exhorta e! Apóstol/ no manda. Véase lo

qu~

se dice en

la Epist.

nd

Ephu.

IY.

1.