CAPITULO IX.
21'[
Dios : sino los que son hijos de la
·promesa, son contados por des–
cendientes.
promissionis , aestimantur in se–
mine.
9
Promissionis enim ver–
bum hoc est • : Sccundum hoc
tempus veniam , et erit Sarae
fi–
lius.
10
Non solum aútem illa ':
sed et Rebecca ex uno concu–
bitu habens Isaac patris no-
stri.
• r r Cum enim nondum na
ti
fuissent, aut aliquid boni egis–
sent aut mali, ut secundum ele–
étionem propositum D ei maneret,
1 2
Non ex operibus, sed ex
vacante diétum est ei :
13 Quia ' maior serviet mi–
nori , sicut scri ptum est:
I~ob
dilexi , Esau aulem odio ha–
bui.
14 ¿Quid
er~o
dicernus ?
¿Numquid iniquitas apúd Deum?
Absit.
9 Porque la palabra de la
promesa es esta': Yo vend ré por
este tiempo ,
y
Sara tendrá un
hijo •.
10
Y no solamente ella': mas
cambien Rebecca de un ayunta–
miento que tuvo con Isaac nues–
tro padre concibió.
r r Porque no habiendo aun
nacido , ni hecho bien ni mal,
para que segun la eleccion per–
maneciese el decreto de Dios,
r
2
N o por las obras, sino por
el que llama, le fué dicho a ella:
• 13 Que el mayor serviría al
menor, conforme a lo que está
escrito : Amé a J acob , y aborre–
cí
a Esaú
+.
14 ¿Pues qué
dire~s?
¿Por
ventura hay en
Dios
injusticia~
N o por cierto.
~~
' Gmes. •vnr.
ro. Estas son las pa-
mente en Sara
y
en la preferencia de
labras que dixo el Angel a Abraham ,
y
Isaac sobre Ismaél, sino tambien en Re-
que lucen ver claramente , que
el
naci-
beca. Véase a
E sT IO.
Concibió
a dos.
miento de
Is:~ac
fué
milagroso , de pura
4
.,01lo amé tauto a E sazí, como
se
Ice
gracia,
y
muy diferente del de l smaél,
en
M A LAQ.
1.
2 .
3·
Esaú
y
J acob fueron
gue
fué natural ; puesto
que la promesa de
dos gemelos hijos de R ebeca, única cspo-
aquel nacimiento fué hecha a una muger
sa de I saac. Entrambos estaban en el vien-
estéril, cuyo marido no estaba y a en edad
tre de su madre ,
y
no habian hecho aun
de poder procrear.
ni bien ni mal. Esto no obstante D ios amó
' Dentro de un año , y\n esta misma
al uno ,
y
aborreció
<f
o. Estos dos hi-
estacion volveré por aquí , y Sara tendrá
jos , o mas bi
sus descendientes , son
ya un hijo. La generacion de Isaac fué
fi-
segun S. }>
ABLO ,
la figura de los Judíos
gura de la regeneracion
y
adopcion grarui-
-incrédulos ,
y
de los c;ue se salvaron por
ta,
tanto de los Gentiles , como del mis-
la.fe. Todos son por
SI
mismos dignos del
mo lsraél;
y
el
haber desechado a I sffiaél,
odio de Dios , porque todos son peca-
lo fué de
la
·rcprobacion de los Hebréos
dores. Y si Dios dcxando a los unos en
carnales.
su pecado , IJ:una a los otros a
la
justicia
.' Y la figura de esta preferencia gra-
y
a
la
vida eterna , es sin arencion a nin-
tulta de los Christianos , que son los ver-
gun mérito , ni aétual ni previsto ,
y
so-
dadcros hijos de
la
promesa sobre los Ju-
Jo por una clcccion de misericordia , que
dios infieles , que no lo son sino segun la
únicamente se funda sobre su voluntad.
natur.UczJ.
y
1.:\ carne , se vi6 no sola-
S. Auo.
E
p.
exc.
Cap.
IIT.
y
S.
TUOMA$,
a
G e11'.r.
XVII/.
10.
ú
G enes.
~xv.
24.
t:
G enes. xxv.
2J.
Tom.II.
Ee