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E PISTOLA DE S. PABLO A LOS ROMANOS.
c on demnationem ; sic et per
unius i ustitia m in .omnes ho–
mi nes i n iustifica tionem v i–
t a e.
19
Sicut per inobedientiam
unius h om inis , peccatores con–
stituti su nt multi ; ita et per
unius o bedi tionem iusti consti–
tuentur multi.
20
L ex a utero subintravit ut
abunda ret deliél:um. Ubi autem
a bundavi t deliél:um, superabun–
d avit g ra tia.
21
U t sicut reg navit pecca–
tum in mortem ; ita et g ra tia
reg net per iustitiam in vitam
a eterna m pe r lesum
Christ~m
Dominum nostrum.
hombres en condenacion ; así taro–
bien po r la justicia ' d e uno solo,
irá n tod os Jos hombres en justi–
ficacidn de vid a.
. 19
P orque como por la des–
obed iencia d e un solo hombre m u·
chos • fuero n hechos pecadores;así
tambien será n muchos hechos jus–
tos por la obediencia de uno solo.
20
Y sobrevino la L ey ' para
que a bundase el pecado. M as allí
donde abundó el pecado, a bundó
mucho mas la gracia.
2 1
P a ra que como reynó el
pecado pa ra muerte; así tam bien
reyne la gracia por justicia • para
vida eterna por Jesu Christo nues–
tro Señor.
"
~.-...:_,
precipitado en
la
muerte
y
en ]a
condena- ~
cion.
E n
,r.
1 2.
dice , que el pecado
entró en
d
mundo por
Ult
/1ombre .solo
,
y
h abla de solo Adam
;
porque aunque Eva
conrribu
yó
en su manera a h propagacion
del pecado ; pero el Apóstol lo atribuy e
al hombre , como cabeza
y
p rimer princi–
p io que es de esta propagacion. Prosigue
diciendo ,
que por el pecado vino la muer–
te;
esto es ,
Ja
del cuerpo ,
y
la del alma,
q ue es el mismo pecado. Añ:tdc ,
CJlt'
la
nw~rte
pnfÓ
n.
todos los hombres ,
esto
es,
que todos los hombres que descienden
y
dcscend,er!in deAd am hasta el fin del mun–
do por la vi
a
de
la
generacionordinaria, es–
tán
sujetos
y
quedan condenados a morir
por aquel solo en.J.I.uien,
co~ocabeza,
prin–
cipio
y
raiz del g'éncro Jc;nano , pecaron
todos;yencuya naturaleza corrompid.J han
contraído todos los hombres ,
y
continua–
r~ncontrayendo
de padres a •hijos el
p~ca
d ooriginal , al paso que por
la
g:eneradon
vay:tn particip:mdo de esta naturaleza cor–
rompid:t : al modo que el vicio que se
ha–
lla en la raíz de un árbol , se comunica a
todas sus ramas
y
frutos. Quedando p re–
serv:~da
de b comun culp:-. la Beatísima
V írgcn M:1ria.
Concilio
d~
Tren/o Srs.r. v.
~
. Por el mérito de la justicb.
y
de la
santtdad
d~
mt
solo
Hombrt~
Dios,
reci-
ben los hombres Ja rerhision de Jos
pec:t–
dos , la justicia interior , la santidad que
Jos
conduce
a
la e-¡da eterna.
2
~dos.
MS.
P or
~1 desob~dimiento
...
y
d~úes
obedicimiento.
l
La Ley
fué
puesta entre el pecado
de Adam,
y
la R edencion de
J
csu Christo;
y
baxo de ella se cometieron mayores
pe–
cados ,
y
en may or número que los que
habian sido cometidos desde Ad am hasta
M oysés : no
porque.elfin de
la
L ey fuese
que se multiplicasen Jos pecados ; ántes
p or
cJ
contrario fué dada para poner fre–
no al desarreglo de los hombres. M as co–
mo la L ey , quando es sola , no l1ace mas
que irritar los malos d eseos , el
dcsi~nio
que tuvo
D~s
dando la L ey ,
fué
el
de
humillar el orgullo del hombre , conven–
ciéndole con sus propias caídas de la ex–
tremada flaqueza a que le había reducido
el pecado , y haciéndole conocer que te–
nia
necesidad de otro remedio mas pode–
roso que la Ley para ser curado de
sus
Hagas.
S.
AcusTIN
y
S.
T aoMAS.
4
Cuyo principal efeéto es purificar
Jos hombres
de
sus delitos ,
y
poner eo
su corazon deseos eficaces de vivir sanr:t–
mcnte para que lleguen a la posesion de la
eterna felicidad en
la
gloria por los méri–
tos
y
gracia de
J esu
C~isro.