Table of Contents Table of Contents
Previous Page  218 / 664 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 218 / 664 Next Page
Page Background

·168

SA N MATH E O.

ñguli , sicut constituit mihi Do–

minus.

1

r

Iesus autem· stetit ante

Praesidem " : ct interrogavit

eum Praeses , dicens

b :

iTu es

Rex I udaeorum? Dicit illi le–

s~:

Tu dicis.

·

12

E t

cum

accusaretur a

Principibus Sacerdotum et Se–

nioribus , nihil respondít.

13

T une dici t

illi Pilatus:

iNon audis quanta adversum

0

te

dicunt testimonia?

1·4 Et non respondit ei ad

ullum verbum, ita ut mirarel(lr

Praeses vehementer.

15 Per diem autem sollem–

nem consueverat Praeses popu–

Jo

dimittere

unum

vinétum,

quem voluissent.

16 Habebat autem tune vin–

étum insignem , qui dicebatur

Barabbas.

1(

Congregatis

ergo mis,

dixi t Pilatus :

i

Quem vultis

dimittam

vobis ?

i

Barabbam,

0

an

Iesum , qui dicitur Chri–

stus?

18 Sciebat enim quod per

invidiam trad idqssent eum.

19 Sedente autem

illo pro

tribunali , misit ad eum uxor

1

Causa verdaderamente asombro, que

acostumbrando pedir los Judíos en esta

fiesta solemne de Pasqua la libertad

~~b­

solucion de un reo, fuese Pilato

el

que pi–

dió

por

el

Justo

~los

Justos ,

y

no pu–

do conseguir su libertad. S.

CFJRYSOST.

in M atti1.H omil.LxXXVIT.

Pilatoque co–

nocia

la

inocencia del \!.<;eñor ,

y

que de–

seaba sacarle de las manos

..

~,los

Judíos,

escogi6 expresamente a Bara

',as

para po–

nerle en comparacion del S 'lvador ,

.QO

o

.{J{tlr(. JV.

2 .

del Alfa rero, así como me lo or–

denó el Señor.

II

Y J esus fué presentado an–

te ·el Presidente: y preguntóle el

Presidente, y dixo : iEres tú

el

Rey de los Judíos ? D íxole Jesus:

Tú lo dices.

1 2

Y quando le acusaban los

· P,ríncipes de los Sace rdotes y los

hncianos , no respondió nada.

r ~

Entónces dixole Pilato:

iNo

oyes quántos

testimonios

dicen contra ti?

14 Y no lerespondióa palabra

algll'na , de modo que se maravi–

lló el P

resid

ente en gran manera.

r 5

E.ra

costumbre que el dia

de Pasqua daba el Presidente al

pueblo un preso, aquel que ellos

querían.

16 Y a ia sazon habia un pre–

so muy famoso, que se llamaba

Barabbas.

17 Y habiéndose ellos jun–

tado , díxoles Pilato :

i

A quién

quereis vosotros que yo dé liber–

tad ?

i

a Barabbas , o a J esus,

que se llama el Christo '?

18

P:1es sabia que por envidia

lo bab¿an puesto en sus manos.

19 Y estando él sentado en su

tribunal,envióle a decir su muger:

dudando

q~e

el pueblo a quien Jesus h:t–

bia colm:1do de beneficios , le preferiría a

un ladran, asesino

y

sedicioso. Mas

se

cn–

g;añó ; porque

el

pueblo instigado por los

}>ríncipes de los Saccrdotes,y por sus

An~

cianos o Magistr:tdos , pidió

la liberrad

del f.-tcinoroso ,

y

condenó a ser crucifi–

cado al que

era

la

misma

inocencia.

¡O

quántas veces

hacemos los Chrisria–

nos

el

mismo d mbio que hicieron

los

Judíos !

t~

.11

Luc~xxJIJ.

Iomm.XVIII.

jj.