CA P ITULO
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una ancilla, dicens: Et tu cum
a él una criada, diciendo :
í~
tam-
l esu Galilaeo eras.
bien estabas ·con J esus el Galiléo.
70 At ille negavit coram
70 Mas él nególo delante de
omnibus , dicens : N escio quid
todos,
y
dixo: No sé lo que d i-
dicis.
ces.
7 1 Exeunte autem illo ia-
7 r Y saliendo él a la puerti'•
nuam, vidit eum alia ancilla, et
vióle otra crjada,
y
dixo a los que
ait his qui erant ibi: Et hic erat
estaban allí : Este estaba tamd n
cum Iesu Nazareno.
con J esus Nazareno ',
72 Et íterum negavít cu
72 Y negó·otra vez con ju ra-
iuramento: Quia non noví ho- mento, diciendo : N o conozco
mi nem.
a oeste hombre.
73 E t post pusillum accesse-
73 Y de allí a poco rato lle•
runt qu i srabant, et dixerunt Pe-
garon los que estaban allí ',
y
d ixe-
tro: V ere et tu ex illis es :.t1am
ron a Ped ro: Seguramente tú eres
et loquela tua manífestum te fa-
t!mbien de esas gentes
3
:
porque
cit.
aun tu habla te da bien a conocer,
74 Tune coepit detesta ri , et
74· Entónces comenzó a hacer
iurare
quia
non novisset homi-
imprecaciones ,
y
a jurar que no
nern. Et continuo gallus canta- habia conocido a aquel hombre.
vít.
Y cantó Juego el gallo.
~
75 Et reco rdatus est Petrus
75 Yaco rdósePed rode la pa-
verbi Iesu, quod dixerat: Prius
l~bra,
que le había dicho Jesus:
quam gallus cantet, ter me ne- Antes que cante el gallo , .me ne-
gabis. Et egressus foras , flevit
garás t res veces. Y habiendo salí-
amare.
do fuera, lloró amargamente ••
1
Esta criada
fUé'
la que asistia a la
puerta,
y
habia introducido a Pedro ,
y
viéndolo a la lumbre le preguntó
com~
de
paso
,
segun conSm de
S.
L OCAS :
¿Por~
'llentura
td
tnmbieu eres de lij disci)mlos
de
t'St!
hombre ?
Lo que dcspues confirmó
y
dixo, como
)'~1rece
de
S.
MATHEO
y
S.
MARCOS:
Ttt tambit:n estabas cou Je–
sus
el
G aliléo.
Pedro negó primeramente,
y
dixo que no le conocia ,
y
luego se sa–
Ji6 del :hrio , m:ls no de
la
casa.
'J.
Otros de los
que allí ctstaban
,
y
uno de ellos pariente de Maleo , cono–
cieron que Pedro era Galiléo ; porque
b
lengua de esta Provincia tenia mu–
chas palabras propias del idiema Sama–
rit.'\llo
y
Sy ríaco , las quales eran diso-
•
nantes al oído de los Jerosolymitanos.
3
Pedro era Galiléo ;
y
aunque
habla~
ba la misma lengua que Jos Judíos ;
pe~
por algun idiotismo, o por la pronuncia–
cie n diferente "daba a entender que era de
Galiléa.
Esto
mismo se experimenta en
ca~
todas las Provincias de un Reyno, en
que
c::~da
una tiene , o pronunciacion di–
ferente, o idiotismos peculiares.
4
S.
LuCAS
dice. ap.
xx
II.
61. que
el Señor volvió
la
cara para mirar a Pe–
dro. Esta mirada del Señor le atravesó
e~
corazon ,
y
le hi.ico conocer el abismo
~n
que había
'do . Por lo qua! tocado de
una parri
ar gracia suya salió fuera ,
y
llor6 su pecado amargamenre. S. Aucu–
iTlN.
de Grat. Christi Cap.
XLV. 11.
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