

SERGE GRUZINSKI
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•
En
/as
im6genes,
se
protong6 targamente una miroda europea, por ejemplo
estos
enfren tamientos en tre indios
y
espano/es
en
mosas
cerradas, como
en
/as guerras
en el Viejo Mundo.
pretenden que vendr6 del cielo
cristiano
y
del dios todopoderoso
y
(mico de los europeos.
lOccidental o europeo?
iPor que la mundializaci6n iberi–
ca resulta ser una etapa funda–
mental de la historia del globo
y
una de las fuentes de nuestro
presente? Por varias razones que
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todasme parecen cruciales. En
primer lugar, vemos esbozarse
en el siglo XVI la noci6n de oc–
cidente
y
occidental : cuando,
en los anos de 1550, el agustino
Alonso de la Veracruz publica en
la ciudad de Mexico sus
Comen–
tarios
a
la obra de Arist6teles,
o
sea cuando entrega a la joven
imprenta mexicana las primeras
obras de filosoffa concebidas
y
redactadas en el continente
americano -la
Dialectica reso–
/utio
(1553)
y
la
Physica specu–
latio
(1557)- no cabe duda de
que estamos frente a una pro–
ducci6n intelectual que deja de
ser estrictamente europea para
volverse occidental.
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Una obra,
sea dicho de paso, que introdu–
jo el nombre de Copernico en
el Nuevo Mundo, a pesar de las
distancias oce6nicas. Podrfamos
decir lo mismo de la obra dra-
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