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Dejo á Vd. y

al

Comandante Bergara todo el honor y toda la gloria de

las ideas y de los planes que acariciaban en Marzo y en Junio del año pasado

en cuya fecha yo no estaba en el país, porque

pr~dicaba

sin necesidad de abra–

zos fraternales y de protestas de conversion, el imperio de las leyes, la efec·

tividad de los garantías coostituciooales, la verdad del sufragio - sosteniendo

que la patria era de todos y para todos.

>

Si Vd. quiere discutir los altos intereses del país, la paz y los medios de

realizarla, estan siempre abiertas para Vd. las columnas de

El S iglo:

pero es–

pe,ro que las ocupe con objeto mas útil que decirnos, que debemos combatir

-la

ignorancia,

el

desierto,

la

m z'ser ia, frutos malditos de la guerra á v il,

porque vulgaridades semejantes son indignas de un espíritu tan ilustrado como

el que me complazco en reconocer en el Comandante Estomba, de q nien soy

atento y afmo. S . S.

José P. Ramirez.

(

I)

C ARTA DEL DR. HERRERA AL DR.

RAMIREZ

Cuestiones de actualidad -Bases de paz- Paralelo entre los Gobiernos de B erro y Batlle y

entre las revoluciones de Flores

y

Aparicio

«

Sr. Dr. D. J osé P . Ramirez.

Montevideo.

>

Mi estimado Dr. R amirez :

~

El fin útil que me propuse al dirigir á Vd. mi carta del 30, cuya con–

testacion recien ayer he podido leer en

El Siglo

del 5 á causa de los retar–

dos nacidos de la cuarentena y dias feriados anteriores, no era otro que

invitarlo á Vd., como representante de su partido en la prensa, á que ade-

(1) El Coronel Estomba contestó

á

esta carta el 24 de F ebrero desde las columnas del perió–

dico

La Revolucion

que se publicaba en la villa de M elo,

diciendo

que ya que. ·desgraciada–

mente el Dr. R amirez, se sustraía

á

la cuestion fundamental acusando de vulgandad el bello

pensamiento que reproducia en su anterior del ilustrado autor de cLa Guerra Civil

y

de los

partidos en la R epública Orienta.l ; tergiversando sus argumentos

y

desconocieodo sus intencio–

nes, no se empeñaba en continuar el debate, dándolo, por consiguiente, como terminado.

Al mismo tiempo dicho Coronel en es.:t su contestacion, censuraba al Comandante B ergara

que le hubiera reprochado ia publicacion de su c.:Lrta,

y

mas que todo le censuraba que se

mostrase ahora partidario despues de haberse presentado en aquel f;!Scrito como campeon de

una idea que estaba mucho mas arriba de los partidos per:;onales que dividian al pais; felicitán–

dose sin embargo que se hubieran confirmado sus ideas emitidas allí por el reconocimiento pú–

blico que hacia su autor de la carta mencionada.