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XI -
se produjo en las cruentas luchas civile
que han ensang ren–
tado el suelo. oriental.
Desde que se invadió el paí
y
empezó la r evolucion á mar–
char de victoria en victoria hasta la t erminacion de la g uerra,
las vidas de los he rido
y
prision eros hechos por las tropas na–
cionalista
en las distintas p eleas fu eron siempr e re petadas,
rompiendo de ese modo los in va ores con las sang ri enta
tradi–
cione del pasado, en que el vencido sabia de antemano que no
scapa ría sin morir á la bárbar a saña del inhumano vencedor.
orno un documento importante que pone de r elieve los pro–
pó ·ito qu animaban
á
la revolucion, s u crito por los genera–
l
de ella, trascrib imos e n ' eguida el manifi e to que dieron
al encontrar e reunidos en el t e rritorio de la patria, en el mes
d
eti emb r e de 1870.
«
MA
IFIE TO AL PUEBLO
la de la Nacion; nó la ban-
de un pueblo que
· y
un partido político que no
1
pa ado, para amoldar
á
ella
partido
in norte, condenado
á
ido impot nte para producir