Table of Contents Table of Contents
Previous Page  426 / 548 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 426 / 548 Next Page
Page Background

412

LORD MACAULAY•

.donda

que había mandado un regimiento contra Car–

los I en Edgebill,

no esperaba oir que nadie viniese ako1·a á

hablar de ese núio á quien Uaman.P1'fnd1Je de Gales,

y

espero

que esta será la última vez que se llaga mención de su nom–

b1·e.

»

Después de mucho discutir, se resolvió presentar

Guillermo dos comunicaciones. Pedíasele en la pri–

mera que se encargase provisionalmente del Gobier–

no, y en la otra, se le excitaba

á

invitar por cartas

circulares, autorizadas cou su firma,

á

todos los dis–

tritos electorales del reino para que enviasen repre–

sentantes

á

Westminster. Al mismo tiempo, los Lores

publicaron una orden desterrando de Londres

y

sus

cercanías

á

todos los católicos, con excepción de al–

gunas personas privilegiadas (1).

Presentaron los Lores al Príncipe sus solicitudes al

siguiente día, sin aguardar al resultado de las delibe–

raciones de los plebeyos que había convocado. Parece,

realmente, que los uobles de cuna se mostraron, en

esta ocasión, celosos de hacer valer su jignidad, y no

se mostraban dispuestos

á

reconocer autoridad seme–

jante en una asamblea cuya existencia no era legal.

Consideraban sus reuniones como una verdadera Cá–

mara de Lores, mientras que la otra asamblea era,

á

sus ojos, una ridicula imitación de la Cámara de los

Comunes. Guillermo, sin embargo, se excusó pru–

dentemente de no tomar ninguna resolución, basta

haberse enterado de la opinión de los caballeros, que

anteriormente habían sido honrados con la confianza

de los condados y ciudades de Inglaterra (2).

(ll Notas de Halifnx; MS. de 1.ansdowne, 225;

Diario de

Cla–

rendon,

dic.

24. 1688;

Gaceta de Londres ,

dic. 91.

(2) Citters, dic. 25 (enero 4), 1688-89.