REVOLUCIÓN DE INGLATERRA.
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y
los ricos; y Chelsea, cuya población pasa hoy de
cuarenta mil almas, er_a un tranquilo villorrio poblado
por unos mil habitantes (1). Al
' orte ¡mela tranquila–
men
el ganado, y donde hoy se extiende el distrito
de Mail'ylebone, y en la mayor parte del sitio que ac–
tualmente ocupan los distritos de Finsbury y de
Tower Hamlet,s , los cazadores, seguidos de sus perros,
se en tregaban á su diversión favorita. .Insliug ton era
casi una soledad, y los poetas de la época gustaban
de hacer contrastar u silencio y reposo con el ruido
y el estrépito de la monstruosa Londres (2). Al Medio–
dfa se une hoy l.a capital con los arrabales por varios
puente , no inferiores en magnificencia
y
solidez á los
más bellos monumentos de los Césares; pero en 1685
una sola linea de arcos irregulares, por encima de los
cuales sobrcsalian miserables y sucios casucos, ador–
nados, siguiendo una costumbre digna de los bárbaros
de Dahomey, de una veintena de cabezas de malhe–
chores, impedían la navegación del río .
XXVIII.
LA CITY.
El barrio más importante de la metrópoli era la
OifllJ
propiamente dicha. En tiempo de la Restaura–
ción habla sido edificada en su mayor parte de ma–
dera y yeso, pues los pocos ladrillos que entonces se
(1 ) Lyson
Environ• o( Lonrlon.
El número de bautizados en
Chelsea, de 1680
á
1690, no pasaba de cuarenta y dos al aiío.
(2) Cowley,
Di•COUl'H o{ solitude.