las islas Gal ápagos, como el mismo historiador lo sugiere, apoyándose en
esta imporlaute observacióu que los primeros navegautes que las exploraron
"no hallaron en ellas ningún indiano, pero sí varias cuevas con vestigios de
anliquíúmos fogones" (119,
1, I53). Pero ,:cuáles podrán ser las islas más
lejanas, en cuya rula los Galápagos servían a modo de escala ;¡
De las tradiciones a que se re!iCI·e Velnsco se han consct·vado muy pocas,
JJabiéndose perdido los escritos de uno de los escri tores que las había reu–
nido con el mayor cuidado
(11!.1,
1,
102).
Fig.
~.-Balsa constt·uíd:~
con odres de <fuero de
qc.:~.
111arina.
usa(.]a en In cosl;t de Chlle
según
l~rcr.icr
(38,
pi. XVI)
Segú n rl cosla
(1,
1, go), los indios ele lea
y
de Arica contaban que en
otro tiempo tenían ellos la costumbre de ir hasta unas islas situadas a gran
distancia, viaje que hacían cómodamente en sus embarcaciones hechas con
odres de piel de foca (fi g.
2).
Por muy notables que hayan sido las cua–
lidades núuticas de estas embarcaciones, scgmamentc no serian capaces de
soportar una navegación muy prolongada
y
es muy probable que las islas
en cuestión sean las islas Chincha y que·no puede LL·atarse de islas poli ne–
sias (9, 25g).
El asunto se presenta ele diverso modo con relación a las tradiciones si-·