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Es ilustrativo esbozar la formación de los

municipios en Europa, ·a fin de fijar con

claridad los antecedentes de la función co–

munal en tierras de América, formada bajo

el influjo de aquellas inspiraciones y ex–

periencias. La aldea rural dió vida al in–

cipiente municipio que después llegó a ser

la "commune" y se había desarrollado si–

glos antes de la revolución francesa, al ma–

durar el :feudalismo y en las postrimerías

de la dominación. Las pequeñas parroquias

· surgieron a medida que crecían las aldeas

y sea por la experiencia de las ventajas ,así

obtenidas o porque el espíritu comunal in–

surgía r-eclamando formas nuevas, en ellas

se perfiló la autoridad

comú~

de las asam–

bleas generales de habitantes convocados al

aire libre, casi siempre junto al templo, le–

jos del castillo donde vivía el señor. Fran–

cia alcanzó a tener 40.000 pequeños mu–

nicipios

que

comenzaron a trabajar por la

autonomía de estos pequeños núcleos ve–

cinales.

Desde el siglo XI, el crecimiento de la

autonomía municipal fué afirmándose cada

vez más en busca de prerrogativas y privi–

legios que el poder central no podía negar,

porque las nacientes poblaciones sólo que–

rían perfeccionar las condiciones de su vida

sencilla, mejorando el abastecimiento

y

el

disfrute de los bienes comunes. En la revo–

lución francesa, la "commune" fué investi–

da de facultades discrecionales para inves–

tigar los delitos cometidos por los enemigos

de la causa popular, y en el Ayuntamiento

se concentró un poder que sin dejar de ser

municipal virtualmente dirigía los primeros

pasos del movimiento insurrecciona!.

· Ya en 1808, Prusia había establecido la

autonomía municipal con la ley promulgada

el 19 de noviembre de este año, reaccionan–

do contra -el poder central que, desde 1723,

nombraba burgomaestres, tesoreros y con–

cejales sin consultar la voluntad de las pe–

queñas localidades. Con clarividente criterio

Stein preconizaba para las ciudades la afir–

macwn de un espíritu cívico en la vida

común, porque el municipio es el núcleo

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constitutivo de la nacwn. Dicha ley había

abolido los derechos de los señores feudales

sobre ciudades y aldeas y proclamó el prin–

cipio de soberanía, consistente en que el

pueblo debía elegir a sus personeros. En este

proceso se percibe que la ciudad va

sepa~

rándose gradualmente del alma rural, s·e

emancipa del campo y crea la vida urbana,

dándole un vigoroso impulso que luego

in~

fluirá en el curso de los acontecimientos

nacionales; puesto que la idea de la

liber~

tad cobró inusitado empuje cuando el hom–

bre se dió cuenta de ser el centro de

gra~

vedad de un sistema · de conc-entración de

voluntades afines, y de este modo la ciudad

vino a ser la expresión específica de la

libertad. Lo mismo sucedió en la "polis'"

romana, donde las grandes aglomeraciones

urbanas de esclavos y libertos, frente a pa–

tricios del "imperium", crearon problemas

que el pueblo quiso resolver por su inicia–

tiva y voluntad. Cuando en Europa hizo su

aparición el tercer -estado, las revoluciones

urbanas estaban en plena fermentación,

porque a los títulos de nobleza por primera

vez se oponía el talento, la eficacia práctica.

del trabajo y las ventajas de la economía

pública, liberal; y así surgió la burguesía

arraigada sobre lo económico, nuevo y co–

mún denominador de las inquietudes gene–

rales. Por primera vez en la historia, la

plebe opuso la libertad a las prerrogativas.

y privilegios y se alistó en los partidos po-–

líticos, pero ya no con el espíritu del "po–

pulus romanus" sino con la clara concien-.

cia de que tenía e_n sus manos el destino.

futuro de la sociedad.

En América, el proceso de los munici-.

pios ha sido análogo y aunque ha seguido

las grandes líneas evolutivas universales.

tomó una fisonomía propia. El Cabildo pa–

ceño inicia modestamente su vida e historia

con la fundación de la ciudad, con algunos

regidores que tenían

jurisdic~ión

civil y

pe·.

nal, y ejercitaban la administración de la

naciente comuna. Lo importante en esta

primitiva organización es que los cargos de·

preboste, alférez real y cabildantes podían_